La defensa del exvicepresidente Amado Boudou confirmó que apelará la resolución firmada por el juez Daniel Obligado, quien revocó su prisión domiciliaria, tras el fallo de la Corte Suprema que dejó firme su condena a cinco años y diez meses de cárcel por el caso Ciccone.

"Revocaron la prisión domiciliaria de Boudou sin argumentos", dijo la abogada de Boudou, la sanjuanina Graciana Peñafort, en declaraciones a El Destape Radio, al considerar que "lo de Boudou es claramente el lawfare que sigue operando".

Además, Peñafort, que también se desempeña como directora de Asuntos Jurídicos en el Senado, donde vela por la firma de Cristina Kirchner, resaltó: "El juez Obligado es el último eslabón de una cadena que empieza con la Corte. La Corte rechazó abrir el caso Boudou sin hablar del espionaje que sufrimos los abogados, sin hablar del pago del hotel a [Alejandro] Vandenbroele".

Boudou está en arresto domiciliario desde abril pasado, cuando Obligado así lo dispuso y lo mandó a controlar con una tobillera electrónica. A comienzos de diciembre, la Corte Suprema de Justicia dejó firme su condena. Ahora, la defensa tiene un plazo de 10 días para presentar su apelación.

Los fiscales Marcelo Colombo y Guillermina García Padín pidieron que Boudou regrese a la cárcel para cumplir con su condena.

Peñafort no fue la única que cuestionó a la Justicia por la situación del exvicepresidente. En diálogo con la misma emisora, el legislador porteño y asesor presidencial Leandro Santoro se refirió a la revocación de prisión domiciliaria de Boudou y dijo: "Con lo de Amado es claro el intento de un sector del Poder Judicial de marcarle la cancha a la política".

"Tal vez lo de Boudou sea una forma de contestarle a Cristina lo que dijo en La Plata: que el lawfare es para condicionar a los funcionarios actuales. Lo de Amado es una provocación terrible", agregó Santoro.

También criticó apuntó al Poder Judicial el diputado nacional Hugo Yasky, quien dijo: "Necesitamos más diputados, más senadores, más movilización social para fortalecer el poder de nuestro pueblo en la lucha contra ese aparato oscuro que es el Poder Judicial".

"El lawfare es un tema que nos tiene que preocupar a todos. Es una deuda pendiente de la democracia, para mí es aberrante lo que está pasando con Boudou. Son jueces que defienden los intereses de un sector concentrado", agregó Yasky.

El propio Boudou habló ayer sobre el fallo que lo perjudicó y dijo: "Es un acto de crueldad [el fallo]. Yo en algún sentido soy una anécdota. La principal perseguida política es Cristina".