Las heridas abiertas que dejó el resultado de las elecciones PASO de Santa Fe volvieron a encender los ánimos ayer y dejó al filo del desmadre total a la interna feroz en Juntos por el Cambio, y se rompió así la breve tregua que intentaron Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta.

Lo llamativo es que la pelea de los principales referentes del Pro se recalentó con un hecho que ocurrió días atrás y recién ayer el sector de Bullrich explotó al sentirse tocado y salió a pedir explicaciones.

Todo comenzó la semana pasada cuando Juan Manuel López -dirigente de JxC cercano a Larreta- pronosticara que un gobierno de Patricia Bullrich podría terminar como el de De la Rúa en 2001. La analogía no necesitaba ahondar en explicaciones y enfureció a los halcones del Pro. Ayer, un grupo de legisladores y candidatos de la lista La Fuerza del Cambio -de la exministra de Seguridad- publicaron un documento a través del cual expusieron "su máxima preocupación" por las expresiones vertidas por parte de dirigentes afines a Larreta y exigieron al jefe de Gobierno porteño que solicite una "tajante retractación pública" del diputado López. Lo contradictorio del comunicado es que se difundió tras una larga campaña de críticas y exabruptos desde ese sector contra Larreta como estrategia de campaña de cara a las PASO del 13 de agosto.

"Creemos que distintas manifestaciones emitidas desde su espacio no sólo no aportan nada a la buena convivencia democrática, sino que, además, no representan los valores de Juntos por el Cambio y lesionan las peleas que estamos dando juntos para terminar de una buena vez con el populismo kirchnerista", manifestó el comunicado firmado por Maximiliano Guerra, Cristian Ritondo, Néstor Grindetti, Maximiliano Abad, Federico Angelini, Damián Arabia y Federico Pinedo, entre otros. Es decir, que la plana mayor del espacio de Bullrich es la que salió con los tapones de punta a ventilar las rencillas internas que tanto daño electoral le hizo al bullrichismo las PASO en Santa Fe. Allí, el domingo se castigó en las urnas la estrategia de confrontación extrema personalizada por la senadora radical, Carolina Losada, la precandidata de JxC que apadrinó Patricia y que sufrió una dura derrota a manos del legislador provincial de la UCR, Maximiliano Pullaro, el delfín de Larreta.

La candidata que se postuló bajo el ala de Bullrich para la gobernación apuntó con dureza contra el candidato referenciado en Larreta al que vinculó con el narcotráfico, que golpea con fuerza a la ciudad de Rosario en particular. Mientras que Losada sumó críticas por poner a su hermana en el Senado y "hacer campaña con avión privado".

"Contrario a lo que dice esa carta, mantengo mis diferencias internas en el ámbito democrático. No comparto ni la victimización ni la cancelación del debate, menos aún cuando es selectiva", refutó Juan Manuel López ayer tarde en redes sociales tras el nuevo escándalo. Y desvinculó al alcalde porteño de la comparación De la Rúa-Bullrich, aunque el daño ya está hecho.

Según el texto de los aliados políticos a Bullrich, se refleja una preocupación ante la no retractación del diputado López. "Estas expresiones nos preocupan además porque coinciden casi punto por punto con las mismas que reparten el kirchnerismo y su ministro de Economía Sergio Massa, en otros", dijeron. "Son conceptos que intentan inyectar el miedo y disciplinar a los argentinos. Pretenden inocular a la población contra el cambio predicando el temor para así mantener a la Argentina en la decadencia y el sometimiento", agregaron luego.

Las pifiadas de la "Piba" en la batalla

Vale recordar que poco tiempo atrás se registraron otras expresiones y acciones desafortunadas hacia Larreta por parte de Patricia Bullrich en las que, por ejemplo, se mostró junto a una foto con una estatua del Doctor René Favaloro y acompañó el posteo en redes sociales con el mensaje: "Quise venir acá y rendirle un homenaje a un gran argentino". Favaloro se quitó la vida, agobiado por las deudas, durante la intervención de Larreta en el PAMI.

En otra ocasión, Bullrich había apuntado contra la gestión de Larreta en el plano de la educación. "Solamente Mendoza, San Luis y Santiago del Estero tuvieron más de 80 días de clases en lo que va del año, mientras que la provincia de Buenos Aires sólo tuvo 62 y la Ciudad de Buenos Aires, 71. ¿Saben por qué? Por medidas de fuerza de los sindicatos docentes. Si no cambiamos esto de raíz, la decadencia seguirá y no habrá futuro para los chicos. Conmigo, esto se acaba", planteó Bullrich.