La presbicia es la pérdida inevitable de la visión de cerca y comienza a hacerse más latente a partir de los 40 años, convirtiéndose en algo tan natural como molesto del proceso de envejecimiento.
Con la edad, el cristalino se endurece y el músculo ciliar pierde eficacia para manipularlo, produciéndose una acomodación insuficiente. Esto se manifiesta como una incapacidad para enfocar objetos cercanos y crea una imagen borrosa.
Hasta ahora la solución para este problema era usar anteojos recetados con la graduación adecuada para que cada paciente pueda ver sin dificultad. Pero la ciencia no se detiene y ahora, una gota por día, permite independizarse de los anteojos.
Se estima que 1.800 millones de personas en el mundo tienen presbicia, y que más de 826 millones no cuentan con una corrección adecuada, lo que impacta directamente en su calidad de vida y en la posibilidad de realizar actividades cotidianas.
De ahí la importancia de contar con un nuevo tratamiento. Y lo mejor es que ya está disponible en Argentina.
La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) acaba de aprobar las primeras gotas oftálmicas para la presbicia.
El medicamento, a base de pilocarpina al 1.25%, requiere una sola aplicación diaria y permite recuperar la visión cercana durante entre 6 y 8 horas, sin necesidad de anteojos ni intervenciones quirúrgicas.
Se trata de la primera alternativa no invasiva, eficaz y segura para esta condición natural asociada al envejecimiento ocular. No es una enfermedad, sino un cambio fisiológico en el cristalino, la lente natural del ojo, que pierde progresivamente su elasticidad y capacidad de enfoque.
La llegada de estas gotas representa un cambio de paradigma en el manejo de la presbicia, que hasta ahora sólo podía tratarse con anteojos o cirugía. No reemplaza en todos los casos a los anteojos, pero sí puede reducir significativamente su uso y mejorar la calidad de vida visual.
La decisión final debe ser evaluada junto a un oftalmólogo.
Matías Deprati (MN 98.130), director médico del Laboratorio Elea, que desarrolló el nuevo colirio, aseguró que es el primer paso hacia una nueva categoría de tratamientos oftalmológicos personalizados.
Sobre el remedio, el directivo explicó que ofrece una opción más práctica, reversible y no invasiva, ideal para personas que están en etapas iniciales de la presbicia, que aún no quieren depender de anteojos para leer o usar el celular.
Las gotas están indicadas para adultos con presbicia, especialmente entre 40 y 55 años, sin enfermedades oculares graves.
Este medicamento es de venta bajo receta, por lo cual sólo se debería dispensar en las farmacias con la prescripción del médico tratante. El precio es de 29.000 pesos.
Habrá cobertura por parte de la mayoría de los agentes de salud, lo que permitirá un acceso equitativo.
Cómo funciona:
Con una sola gota por día, que comienza a actuar a los 30 minutos de colocada, este medicamento mejora de forma temporal la capacidad de enfoque del ojo, sin necesidad de anteojos, lentes de contacto ni cirugía.
Su efecto dura entre 6 y 8 horas.
Hasta un 64% de los pacientes con presbicia alcanzaron mejoría de la visión cercana con una sola administración diaria.

Su principio activo actúa mediante dos mecanismos clave:
- Contrae el esfínter del iris, lo que reduce el tamaño de la pupila (miosis) y genera un “efecto estenopeico” que aumenta la profundidad de foco.
- También contrae el músculo ciliar, lo que mejora la capacidad del cristalino para acomodar el enfoque en objetos cercanos.
- Esta acción combinada mejora significativamente la agudeza visual cercana sin afectar la visión lejana. Además tiene una formulación optimizada que ajusta rápidamente su pH al de la película lagrimal, mejorando la tolerancia, reduciendo molestias y aumentando la biodisponibilidad ocular.
- No obstante, desde la compañía farmacéutica advirtieron de efectos adversos frecuentes. Entre los más comunes se encuentran cefalea, enrojecimiento ocular y visión borrosa. La mayoría de estas reacciones fueron leves, transitorias y se resolvieron por sí solas.

