Por Dr. Oscar Adárvez Abogado
¿A quién no, se le enseñó alguna vez en la escuela, que en la época de Colón la gente creía que la tierra era plana y él decía que era ‘redonda’’? Por esa convicción afirmaba que se podía llegar a las Indias con dirección al oeste, circunvalando el planeta e incluso, nos contaban la anécdota del huevo que Colón paró de un golpe. Sin embargo, no sólo ya habían noticias de tierras existentes al oeste del océano por la llegada del Erik el Rojo, rey vikingo, a Groenlandia y de allí a la península de Terranova, actual Canadá, sino que el radio terrestre y por lo tanto, la circunferencia de la tierra ya habían sido medidos mil setecientos años atrás y este dato, ya era conocido por muchos matemáticos y científicos e incluso por la Iglesia Católica, gran custodia del conocimiento, lo que se puede comprobar cuando se visita el Vaticano y se tiene posibilidad de ingresar a sus archivos, entre los que se encuentran los mapas y la cartografía de la época y aún antes.
Diámetro y circunferencia terrestre
Eratóstenes de Cirene (Cirene, 276 a. C. – Alejandría, 194 a. C.) era un matemático, astrónomo y geógrafo que logró medir el Diámetro y la circunferencia terrestre con un ingenioso método contando con los avanzados conocimientos que ya existían.
Si la tierra es esférica, como lo son el resto de todos los otros planetas, satélites y cuerpos celestes, su superficie presenta una curvatura, la que se puede medir como lo hizo Eratóstenes, cavando un pozo en Siena, de África (no de Italia) y observando la sombra que proyectaba una vara larga plantada perpendicularmente, o quizás un obelisco, en Alejandría, estando ambas ciudades en una latitud semejante sobre, o cercana al Trópico de Cáncer, en el solsticio de verano al mediodía, cuando estando el sol en el cenit iluminó el fondo del pozo en Siena que al mismo tiempo proyectaba una sombra del obelisco o vara (que debe haber sido bien alta) en Alejandría.
Más cálculos matemáticos
Si se simplifica la esfera de la tierra a un plano o círculo, este tiene 360° y por la curvatura deducida por ambas medidas previamente tomadas (los rayos verticales del sol en Siena y levemente inclinados proyectando sombra en Alejandría) pudo calcular una distancia estimada por cada grado de la circunferencia que multiplicada por 360 le permitía obtener, muy aproximadamente, la distancia que buscaba.
De hecho, su cálculo lleva a estimar que la tierra tendría 39.614 km, frente a los 40.008 km considerados en la actualidad, es decir, un error de menos del 1%. También se podría haber utilizado el teorema de Thales, pero las imprecisiones de las medidas que se hubieran obtenido hacían mucho menos exacto el resultado.
Este dato sorprendente de la historia, ha sido muchas veces desconocido y lo que se ha enseñado en las escuelas, al respecto, no sé hoy, tiene más de leyenda que de verdad.
En definitiva, hoy somos por lo que otros fueron antes que nosotros y debemos indagar sus admirables inteligencias, empeño y descubrimientos, de los cuales podemos obtener respuestas aún hoy.

