El clima volvió a dar la nota esta semana, y el efecto que causaron las lluvias y días nublados en los viñedos es que acrecentaron el riesgo de que reaparezcan los focos de peronóspora que ya se habían detectado el mes pasado, y que irrumpa la podredumbre de los racimos, todas plagas fúngicas (por hongos) que hacen mermar la producción de uva.

Hay seis departamentos en riesgo -Zonda, Caucete, San Martín, Sarmiento, 9 de Julio y 25 de Mayo- y por eso desde el INTA ayer salieron a recomendar que en forma urgente se realicen aplicaciones de agroquímicos específicos con el objetivo de frenar los avances de esas enfermedades en los viñedos sanjuaninos.

Tal como ocurrió en noviembre y principios de diciembre, las condiciones climáticas de alta humedad y precipitaciones volvieron a repetirse esta semana y a encender la alarma en la vitivinicultura, por el peligro que se incremente la incidencia de enfermedades que atacan la uva. Hay dos escenarios distintos según se trate del hongo de la peronóspora -una de las enfermedades más destructivas para el viñedo- o del hongo de la podredumbre, también conocida como Botrytis.

Rodrigo Espíndola, investigador del INTA en Caucete, aseguró que el clima lluvioso y con una continuidad de días nublados del mes pasado ya produjo la aparición de ataques de peronóspora en media docena de departamentos vitivinícolas, que se detuvieron cuando hubo altas temperaturas, pero que hay riesgo de reaparecer.

""El inoculo de la peronóspora está instalado, y estos últimos días las condiciones para el desarrollo de la enfermedad han sido propicios por la cantidad de tiempo que se mantuvieron las hojas mojadas", explicó ayer.

Añadió que las variedades de uvas para pasas no tienen tanto peligro porque ya se están cosechando, y en todo caso se podrá tratar la planta finalizada la recolección; pero el panorama es distinto y preocupante para las variedades de elaborar vinos.

La amenaza recae sobre los productores que van a cosechar para marzo y abril, porque en el caso de que los viñedos pierden la hoja por peronóspora en esta época, luego no va a haber acumulación de azúcar en el grano y la uva no tendrá grado alcohólico ni peso.

UVAS PARTIDAS

Las segunda situación preocupante es que hay muchos racimos con granos de uvas partidos que ahora son susceptibles de ser atacadas por el hongo de la Botrytis que prospera con la humedad y que requiere de la aplicación de productos sistémicos para su prevención y tratamiento.

El problema de las bayas rajadas es una consecuencia de los ataques previos del hongo Oídio que se produjeron hace unos meses cuando el grano era muy chiquito, y que causa rajaduras cuando el grano comienza a crecer. ""El oídio se debe controlar temprano, allá por octubre; porque ahora ya es tarde", dijo el especialista, quien agregó que esto es consecuencia de un control fitosanitario deficiente a principios de temporada. Ahora, los granos con cicatrices permiten la entrada de enfermedades y cuando empiecen a madurar y formar azúcar aflorará la podredumbre.


"Aún no se ven focos de pudrición porque el azúcar recién se está formando, pero se ve mucha rajadura en los granos y se debe hacer urgente el control fitosanitario. Todos los racimos que hayan tenido daños por oídio y empiecen en estos días a ganar azúcar van a empezar a tener focos si hoy no hacen esa tarea preventiva", alertó Espíndola.

La advertencia desde el INTA es que si sigue el clima como hasta ahora, las condiciones para esta enfermedades son ideales. Entonces el productor que no haya mantenido un plan fitosanitario mínimo que involucre por lo menos 4 tratamientos preventivos, debe realizar ahora las prácticas para combatir los hongos para lograr una buena producción.

> Desfinanciados

Según estimaciones de las entidades viñateras de San Juan, la cosecha nacional de uva de este año sería menor en un 10% mínimo con respecto al año pasado por los problemas climáticos y la imposibilidad económica de abonar, agregar herbicidas para combatir la maleza y fumigar para combatir plagas como el oídio y la peronóspora, razón por la cual no sólo no agregaría excedentes sino que requeriría de parte de los excedentes acumulados.

En riesgo

  • 6  son los departamentos vitivinícolas que se encuentran en peligro por el ataque de enfermedades fúngicas. Son Zonda, Caucete, San Martín, Sarmiento, 9 de Julio y 25 de Mayo.

 

 

Sobre las enfermedades

  • Los costos

Según datos de los productores, las aplicaciones de agroquímicos sistémicos contra peronóspora cuestan alrededor de 10.000 pesos por hectárea, mientras que los productos contra botrytis rondan los 50.000 pesos por hectárea. Un 80% de viñateros sanjuaninos tienen 10 hectáreas y precisarán entonces 600.000 pesos

  • Sin prevención

Desde la Asociación de Viñateros Independientes y la Federación advirtieron que tras varios años con precios bajos al productor este año el productor chico y mediano especuló con las curaciones de calendario, y ahora sólo compra agroquímicos si se ve un problema. No se actuó de manera preventiva.

  • Cuidados

Los productos a aplicar deben estar registrados en Senasa. En todos los casos, se debe tener presente la proximidad de la cosecha y las restricciones de uso en cuanto a cantidad de aplicaciones del mismo por temporada, para evitar generar resistencia al producto utilizado. Se sugiere acudir al INTA más cercano.