El ministro de Economía, Martín Guzmán, buscó alejar este viernes las versiones que indican que el gobierno argentino deberá devaluar su moneda de forma brusca antes de fin de año. En diálogo con los periodistas Ernesto Tenembaum y Reynaldo Sietecase en radio Con Vos, el funcionario planteó: “Tenemos las condiciones y los elementos para continuar con la política cambiaria y no hacer una devaluación”.

Y agregó: “Vamos a continuar con el ritmo de depreciación del peso contra el dólar que venimos manteniendo, de la mano de la inflación, mientras buscamos en forma gradual y en la velocidad que se puede ir reduciendo la inflación”.

“¿No van a devaluar?”, le repreguntaron. “No”, contestó enfáticamente en dos ocasiones el ministro.

El titular del palacio de Hacienda reconoció que la brecha entre el dólar oficial y las cotizaciones paralelas provoca problemas en la economía y están trabajando en estabilizar la situación. No obstante, aseguró que el mercado financiero del contado con liqui es muy chico y el tipo de cambio resultante se mueve muy rápido con pocas transacciones.

“Veamos la situación general. Tenemos una brecha cambiaria muy elevada, pero también se da una circunstancia en la que tenemos superávit comercial, no hay pago de deuda externa en el corto plazo y tenemos 41 mil millones de dólares en el Banco Central de los cuales 12 mil millones son depósitos”, especificó.

Las declaraciones de Guzmán surgen en el final de una semana en la que la cotización libre del dólar llegó a $190, más del doble del precio al que se vende la divisa norteamericana en el Banco Nación para operaciones de comercio exterior. El tipo de cambio “solidario”, al que acceden muy pocos ahorristas, ronda los 138 pesos.

El ministro negó además las versiones que indicaban que el jefe de Estado le había dado un plazo de 15 días para equilibrar la economía.

El funcionario dijo que la grieta política entre el oficialismo y la oposición termina perjudicando los planes para tranquilizar la economía y provoca algunos costos. Rechazó que sea el gobierno quien fomente la división pidió alinear a toda la conducción política detrás de políticas de Estado.