Tras la liberación de los precios, y luego de haber registrado una inflación de 25,5% en diciembre, se está a la espera de que el Indec dé los nuevos valores de incrementos el próximo 14. Si bien algunas consultoras privadas indican que esta cifra estará por debajo del récord al que se llegó hace dos meses, los sueldos de los trabajadores se siguen licuando semana tras semana. Esto se refleja en las góndolas de los comercios, cuyos precios siguen en alza. Según un relevamiento realizado por DIARIO DE CUYO en dos supermercados del Gran San Juan, lo que mayor aumento acumuló fueron los productos de limpieza y aseo, superando, en algunos casos, el 100% en tan sólo el último mes y medio. Así, el incremento promedio sobre 16 productos censados por este diario fue de casi 60%.

Los precios tomados son de ayer, sobre productos de primera marca y comparados con un relevamiento realizado el 13 de diciembre del año pasado. Así se detectó que los elementos de higiene y limpieza personal fueron los que más alza tuvieron en ese periodo. De esta forma, en uno de los supermercados, una esponja para lavar los platos subió un 306,76%, seguido por el papel higiénico y el shampoo (ver infografía).

En cuanto a los comestibles, lo que más se incrementó fue la sal fina, que en uno de los súper en diciembre del año pasado se podía adquirir por $416 los 500 gramos, pero ahora se debe pagar en $850. Otros de los productos de esta categoría que pegaron un gran salto en estos últimos días fueron el yogur y el arroz, que escalaron y se ubicaron con un alza de 128,50% y 124% respectivamente. De los productos de esta área, el que menos aumento tuvo fue el azúcar, mientras que el aceite tuvo una pequeña baja en uno de los comercios.

Sorpresa. En uno de los supermercados se registró una baja de casi $90 en el precio de una marca de aceite de 900 ml.

En ese marco, el gran incremento que se vio reflejado en algunos productos deviene, en parte, de la disparada en los precios de los combustibles que pasaron de $453 (precio nafta súper de YPF) a principios de diciembre, a $839 con la última suba. Además de la liberación en la regulación de los precios, luego de que el Gobierno nacional decidiera no prorrogar el programa Precios Cuidados. Pese a esto, algunas consultoras privadas fueron optimistas con la evaluación de la inflación de enero y esperan que la cifra roce el 20%, adelantando que fue un mes más tranquilo en cuanto a aumentos para los alimentos y bebidas. En contraposición de lo que fue para transporte, esparcimiento y salud, que presentaron las mayores alzas en 30 días. Pese al panorama un tanto alentador, el aumento de las tarifas en energía eléctrica, que entró en vigencia a finales del mes pasado, futuros aumentos de combustibles y las paritarias que ya se encuentran en juego para algunos sectores, podrían provocar nuevas subas en los supermercados y así elevar el costo de vida nuevamente.