Desde la Cámara de Comerciantes Unidos, una de las entidades que agrupa a dueños de negocios de la provincia, se quejaron porque integrantes de la comunidad boliviana en San Juan abrieron 6 locales en el microcentro, pero que funcionan sin cumplir con la normativa vigente. No entregan tickets por las compras, tienen personal en negro y no pagan impuestos ni las habilitaciones. "No están en regla y hacen una competencia desleal con el resto de los establecimientos", se quejó Marcelo Quiroga, titular de la entidad. En contraste con la irregularidad, el dirigente señaló que hicieron un relevamiento que dio como resultado que, por primera vez después de la pandemia, todos los locales de la zona de la peatonal, que son unos 130, están ocupados y funcionando.

"No tenemos nada en contra de los bolivianos, pero queremos que trabajen de acuerdo a la ley", expresó Quiroga, y dio como ejemplo que venden mercadería, principalmente indumentaria y calzado, más barato que el resto de los comercios, "pero es porque ni siquiera te dan una factura cuando vas a comprar".

Sólo en la peatonal hay dos comercios de ese tipo y el último abrió hace pocos días atrás, casi en la esquina de peatonal Rivadavia y el cruce con Tucumán.

"Lo que pedimos es que se los controle y si tienen, por ejemplo, las habilitaciones al día, porque en esas condiciones no podemos competir", sostuvo.

Otros locales del mismo tipo funcionan sobre Laprida y sobre la Avenida Rawson.

"Es como si hubiera una saladita en pleno centro de la ciudad", graficó el dirigente.

Según estimaciones de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), la variedad de puestos ilegales le quita al comercio formal alrededor del 45% de las ventas promedio, cifra que en el interior, como en el caso de San Juan, puede alcanzar diez puntos porcentuales más.

La contratacara de este dato negativo es que cámara celebra que después de la pandemia, que ocasionó serios inconvenientes a los dueños de negocios y que por eso muchos tuvieron que cerrar definitivamente sus puertas porque no pudieron aguantar los costos fijos, ahora y por primera vez todos los locales ubicados sobre la peatonal, es decir sobre Rivadavia y la calle Tucumán, están ocupados y con atención al público.

Contracara. Ahora, aunque las ventas no son las mejores, todos los locales de la peatonal están ocupados.

Contabilizando los ubicados también sobre las galerías comerciales, que son 5 en la zona de las peatonales, desde Comerciantes Unidos contabilizan unos 130 locales. El rubro indumentaria es el de mayor presencia, le sigue calzado, accesorios para celulares, el rubro gastronómico sobre todo con cafeterías, venta de electrodomésticos, ópticas, joyerías y kioscos.

Quiroga recordó la época cuando a partir de marzo del 2020 los comerciantes fueron obligados a cerrar sus negocios por efecto de la pandemia, excepto unos pocos rubros, como farmacias, ferreterías y supermercados. Y recién después empezaron con las ventas por delivery hasta que después, con horarios restringidos y con cantidad de clientes limitados, pudieron volver a trabajar. Pero durante ese tiempo tuvieron serias dificultades para pagar los alquileres, los sueldos del personal, agua y electricidad y los impuestos. Por eso fue que muchos no pudieron resistir y tuvieron que bajar las persianas.

Recién ahora todos los locales, al menos de esa parte del microcentro, están ocupados, aunque en el sector están preocupados por los constantes aumentos de costos de la mercadería y el precios de los fletes. Es porque San Juan está lejos de los centros donde se produce la mercadería y es muy caro traerla a la provincia.

Según los últimos datos disponibles de CAME, hasta febrero no se habían podido recuperar las ventas históricas y el índice marcaba un retroceso del 0,9 con respecto al mismo mes del 2022.

  • Más despidos

Según las cuentas que sacan en el Sindicato de Empleados de Comercio, en el primer trimestre del año que acaban de finalizar, crecieron un 50% los despidos en los negocios del Gran San Juan, con respecto al mismo período del año pasado. En el 2022 fueron 24 y en los 3 primeros meses del 2023 sumaron 36.

"Es un dato que sale de nuestros registros porque el mismo empleado que resulta despedido nos viene a pedir asesoramiento", sostuvo Mirna Moral, secretaria general de la entidad sindical.

El otro dato que les preocupa es que todavía hay 50 empresas que adeudan parte o en su totalidad el bono de fin de año del 2022, que alcanzó los 24.000 pesos. Pertenecen al rubro de las empresas de limpieza, según la dirigente, y por eso las están intimando para que se pongan al día.