A partir del incremento de la primera sección de la SUBE, que desde el 1ro de enero último trepó a 11,20 pesos, San Juan pasó a ubicarse en el lote de las provincias con el valor del pasaje más caro del país. Es porque se ubica en el lugar número 11º, entre 29 ciudades argentinas, según datos del Ministerio de Transporte de la Nación y un relevamiento del diario La Nación. La cifra es superior incluso a la de otros estados del Nuevo Cuyo, como San Luis (9,75 pesos), Mendoza (8,50 pesos) y La Rioja (8 pesos).

Entre las razones, según explicaron desde el Gobierno local, se encuentran que San Juan fue una de las primeras en modificar las tarifas, antes que otras provincias, que acá no hay subsidio desde el Ejecutivo provincial, que hay menor relación entre pasajeros y kilómetros recorridos que en las grandes ciudades y a que el parque automotor es nuevo e incluso ya aparecieron las primeras unidades para el transporte de personas con discapacidad. "En el último año, la provincia modificó las tarifas una sola vez", agregó Sebastián Pacheco, subdirector de Transporte.


Entre las grandes ciudades que no son capitales de distrito, el listado es encabezado por Bahía Blanca. El pasaje mínimo en esa ciudad fue fijado en 17,30 pesos, aunque el esquema incluye descuentos según el usuario. Otra ciudad que se ubica en los primeros puestos es Bariloche. Allí, el pasaje mínimo fue fijado en 16,44 pesos.

En el otro extrema de la tabla se encuentra Salta (7,45 pesos) aunque desde febrero se aumentará mensualmente 50 centavos para llegar a 10,45 pesos en julio. Otras ciudades por debajo de los 8 pesos son Corrientes (7,68 pesos) y Santiago del Estero (7,95 pesos), aunque los gobiernos provinciales tienen en agenda posibles cambios tarifarios para los próximos meses.

Los valores de referencia corresponden a los pasajes mínimos de colectivo en cada una de las ciudades mencionadas y fueron obtenidos por información del Ministerio de Transporte de la Nación y a un relevamiento del diario La Nación.

En San Juan, la primera sección de la SUBE pasó a costar 11,20 pesos, que en la práctica significó un incremento del 36,6% frente a los 8,20 pesos que costaba antes. El último retoque en las tarifas se había definido en enero de 2017 y se puso en práctica a partir de febrero, con una variación del orden del 21,4%. Fue cuando pasó de 6,75 pesos a los 8,20. El último incremento fue la mayor suba de los últimos 11 años. Pero junto con el retoque tarifario también se registró otra novedad y fue que, por primera vez, se ha implementado un pasaje único para el sector estudiantil. Antes costaba 2,50 pesos y subió 70 centavos, pasando a costar 3,20 pesos, pero con mayor alcance. Por un lado, se extendió el tiempo de uso en toda la provincia porque dejará de tener una permanencia de 9 meses para sumar 60 días más,desde febrero a diciembre de cada año. La otra novedad fue que al tener un valor único, se instrumentó un beneficio para los chicos del interior, que hasta ahora tenían que pagar un pasaje diferencial.

Además, según recordó Pacheco, sigue vigente el 55% de descuento en la SUBE para jubilados, pensionados, beneficiarios de Asignación Universal por Hijo y Veteranos de Malvinas. El año pasado, por ese subsidio, el Gobierno nacional aportó unos 165 millones de pesos.