Los tópicos que persiguen a los británicos dicen que toman té para todo: para desayunar, a mediodía, a media tarde, después de cenar… Esta bebida es un clásico en las islas y aunque, aunque haya personas que no les gusta, no hay reunión que se precie en la que no se sirva un característico y calentísimo té.

Pero parece que esas costumbres no solo afectan a los británicos, sino también a sus animales y el mejor ejemplo lo tenemos en un caballo que trabaja en la policía. Se llama Jake, tiene 20 años y ha trabajado durante los últimos 15 en la Policía Montada de Merseyside, en Liverpol. Y se ve que el contacto le ha hecho adquirir algunas de sus costumbres.

Como se puede ver en el vídeo que se ha hecho viral en YouTube, el caballo degusta plácidamente una taza de té mientras está recostado en su establo sobre una cama de paja. Jake se bebe el té y queda claro que es una bebida que le gusta ya que en ningún momento hace ademán de parar o de tomarse un respiro para descansar.

El té a su gusto

 

Pero, como sucede con los humanos, donde cada uno tiene sus gustos para tomarse el té, a Jake también hay que ofrecérselo como es su tradición: se lo toma con leche desnatada, dos terrones de azúcar y un poco de agua fría mezclada para que no esté demasiado caliente. Es la combinación perfecta para el despertar de este animal.

Lindsey Gaven, responsable y entrenadora de la Policía Montada de Merseyside, explica al Daily Mail que "Jake es uno de los doce caballos que tenemos en el establo trabajando con nosotros y tiene mucho carácter. Todos hemos aprendido su forma de tomar el té: soporta que le des un terrón de azúcar, pero es mucho más feliz cuando recuerdas ponerle dos. Además, si estás cerca del establo y te ve con una taza en la mano, puedes dar por hecho que irá trotando para tratar de robarte un sorbo".