La salud de Alejandra “Locomotora” Oliveras continúa siendo motivo de preocupación. La ex campeona mundial de boxeo, que sufrió este lunes un ACV isquémico, permanece internada en la unidad de terapia intensiva del Hospital José María Cullen de Santa Fe. Según el último parte médico, su estado es crítico, aunque clínicamente estable.
Bruno Moroni, director del hospital, confirmó este viernes que la paciente de 47 años “está estable hemodinámicamente, clínicamente estable y con asistencia mecánica respiratoria”. Además, aclaró que se encuentra bajo un “monitoreo neurológico permanente” para seguir la evolución de su cuadro.
Oliveras fue sometida el miércoles a una craniectomía descompresiva, una cirugía destinada a liberar presión en el cerebro. La intervención se decidió luego de que una tomografía revelara un deterioro en su estado neurológico. Desde su ingreso, presenta pérdida de movilidad en el lado izquierdo del cuerpo.
El episodio comenzó el lunes por la mañana, cuando Oliveras fue atendida de urgencia tras manifestar un síndrome confusional. Inicialmente fue derivada desde un dispensario de Santo Tomé, pero debido a la gravedad del cuadro fue trasladada al hospital provincial. Estudios posteriores confirmaron una obstrucción arterial que provocó el accidente cerebrovascular.
Pese a la gravedad del caso, el equipo médico destacó como factores positivos su edad, su estado físico y la ausencia de antecedentes de salud relevantes. “Eso mejora su respuesta general”, explicó Moroni.
Oliveras es una figura pública muy activa. Desde su retiro del boxeo profesional en 2019 —tras consagrarse séxtuple campeona mundial—, se volcó al trabajo social, a la política y a la difusión del bienestar físico desde sus redes sociales. Actualmente, preside un bloque como convencional constituyente electa por Santa Fe, donde buscaba impulsar una reforma que incorpore al deporte como derecho en la Constitución provincial.
El pronóstico de su salud, por ahora, es reservado. Los médicos insisten en la importancia de actuar rápido ante los síntomas de un ACV: alteraciones en el habla, pérdida de fuerza en un brazo o pierna, visión borrosa y cefaleas intensas. “La consulta médica inmediata es fundamental”, advirtió el director del hospital.