Washington, 6 de agosto.- La decisión del Senado estadounidense de confirmar a la jueza Sonia Sotomayor como integrante de la Corte Suprema, la transforma en la primera mujer de origen hispano en integrar el Alto Tribunal.

Sotomayor logró la nominación con una votación de 68 a favor y 31 en contra, (la mayoría demócrata más nueve votos republicanos) y se transformó además en la tercera mujer en acceder al Alto Tribunal, cuyos cargos son vitalicios.

La confirmación de la jueza, de 55 años y nacida en el seno de una humilde familia portorriqueña de Nueva York, constituye además un importante triunfo político para el presidente Barack Obama, que la propuso para el cargo en mayo pasado.

Si bien Sotomayor se enfrentaba a la oposición de la mayor parte de los republicanos los 59 votos demócratas (faltó el voto del senador Edward Kennedy, ausente por su enfermedad) le permitieron superar la votación sin problemas.

El proceso de nombramiento de la jueza -que jurará el cargo el próximo sábado- duró algo más de dos meses. Tras ser nombrada en mayo por le mandatario demócrata, la semana pasada el Comité de Asuntos Judiciales del Senado recomendó finalmente su nombramiento, por 13 votos a favor y 6 en contra.

En el camino, la hispana debió someterse a numerosas instancias de duro escrutinio en las que debió responder a temas tan controvertidos como el aborto y sortear cuestionamientos de los republicanos sobre su imparcialidad e idoneidad para tan alto cargo.

Hija de padres puertorriqueños, Sotomayor nació el 23 de junio de 1954 en Nueva York y se educó en una escuela católica pública del Bronx.

Posteriormente se graduó en Derecho con los máximos honores en las universidades de Princeton y Yale a mediados de los años 70.