Así, el goleador del equipo en Primera y el hombre héroe en la final por el ascenso ante Huracán el 16 de junio de 2007, retorna al club de Concepción tras una temporada en Independiente Rivadavia de Mendoza, donde jugó casi todo el torneo (33 de los 38 partidos del campeonato) y se despachó con 12 goles.

El amor por la camiseta Verdinegra pudo más, resignó dinero, pero viene pidiéndole a los hinchas que lo tiene que exigir y se olviden de aquel de los goles importantes. El entrerriano de 31 años está de vuelta, en su segunda casa y ante quien considera su gente, a la que viene a demostrarle que está vigente, que les pagará con goles y que retornó "por la gloria"…

-¿El lunes no había nada y el martes cambió el panorama?

-El lunes a la noche tuve la llamada de Jorge Miadosqui (vicepresidente) donde me preguntó y yo les respondí de mis ganas. Él me dijo que tirara número y que hoy (por ayer) lo solucionábamos. Luego me llamaron a las 11, me tiraron una propuesta y llegamos a un arreglo. Bajé un poco las pretensiones para volver pero el club me motivó con incentivos deportivos que sirven para igualar lo que uno pretendía.

-¿Quiere decir que hay premios por goles?

-Sí, por goles, por puestos que estemos. Es lo ideal para un jugador como yo que pegó la vuelta al club y donde me juego muchísimo. Y no es que me esté poniendo un cassette, quiero que los hinchas de San Martín me aplaudan o me insulten por lo que haga a partir del 8 de agosto (fecha de inicio del torneo). Que olviden lo que les di y ahora me tienen que exigir desde la primera fecha.

-¿Tenía ganas de volver?

-Sí, yo desde la primera conversación que tuve creí que íbamos a llegar a un acuerdo porque estaba ilusionado con la vuelta. Me juego mucho, pero sabía que el momento era este para volver, no hay otro, porque si se pasaba después iba a ser muy difícil y por eso antes me fui, solo para respirar, nada más.

-¿Entonces sirvió el año que se fue a Mendoza?

-Sí, porque vuelvo con todas las ilusiones y las esperanzas renovadas para volver a darle al hincha de San Martín lo que se merece.

-¿Se fue bien de Independiente Rivadavia?

-Creo que sí, la relación con Teté (Quiroz) sigue intacta, después con los dirigentes… es que no se llegó a un acuerdo y punto.

-¿Qué significa para usted San Martín?

-Hoy vuelvo porque el hincha me demostró en el partido contra Independiente (se jugó hace menos de un mes) lo que me quiere, porque con los dirigentes lo arreglamos en un día. Además saber que el técnico me pidió es un compromiso y espero responderle. Yo sé para lo que él me trae.

-Si no hubiese llegado Hrabina (lo dirigió en Almagro), ¿piensa que tampoco hubiese llegado Tonelotto?

-Creo que sería muy difícil. Eso es verdad. Esta vez siento que coincidieron en el técnico y los dirigentes mi vuelta.

-¿Tuvo que resignar mucho en la parte económica para arreglar?

-Tuve que resignar, pero también tengo que reconocer que ellos (los dirigentes) hicieron un esfuerzo enorme y que con los objetivos puedo llegar a ganar una suma importante. Vuelvo por la gloria; y si consigo la gloria, consigo el dinero.