Boca logró superar su primer paso sin Carlos Tevez, una partida que podría haberle costado caro. Sin embargo, supo pararse en la cancha y ganó en su estreno ante Estudiantes, por un cómodo 2 a 0 en el marco de la Copa de Oro, en Mar del Plata.

En su resurgir, la 10 la llevó Ricardo Centurión. Y aprovechó muy bien este desafío. El jugador fue una pesadilla para Estudiantes. Porque se paró detrás de Israel Damonte, y en un espacio que tampoco salían a cubrir los centrales. Y ahí lastimó a pura gambeta. De esa manera se filtró y generó el primero, que fue de Lucas Diarte en contra.

Ya con Fernando Gago manejando los hilos en el medio y Centurión picante en tres cuartos. El resto lo hizo Gustavo Bou, que pivoteó con soltura y en la primera que tuvo sacó un cabezazo fenomenal para el 2-0.

Con la ventaja, Boca jugó más tranquilo y se paró de contra. Gago lanzaba los pases largos y Pavón explotaba su velocidad. En el arranque del segundo tiempo, desperdició dos chances clarísimas, sobre la línea de gol y ya con Andújar vencido. Primero no pudo Centurión (la pelota pegó en el palo) y luego tampoco Bou (puso mal el pie en la estirada y le erró al arco).

Estudiantes, sin ideas, eligió enojarse con los chiches de Centurión y nunca hizo pie. Mucho menos cuando a los 22 minutos fue expulsado (por doble amarilla) Alías Umeres y el Pincha se quedó con uno menos. De ahí en más, estuvo todo dicho.