La historia no es nueva, más bien todo lo contrario. Un partido relativamente parejo, donde Desamparados paga muy caro algún momento de distracción o un error en particular. El tema que más alarma en Puyuta es que se repite demasiado seguido y en esta recta final de la Zona Sur el margen de error resulta ya casi nulo. Incluso, desde lo numérico la situación se puso desde ayer, como mínimo, muy compleja. El 0-2 en Chivilcoy ante Independiente, con dos goles en el complemento separados por apenas tres minutos, dejaron al equipo de Ricardo Dillon sumergido en la zona del descenso, separado seis unidades del primer equipo que se está salvando (Camioneros) y con quince puntos en juego por delante. En el primer tiempo, el víbora
contó con algunas opciones como para sacar la diferencia aunque la falta de eficacia, otro mal que lo aqueja durante toda la campaña, le pasó factura. En la parte final, Independiente lo golpeó a fondo dos ocasiones: a los 29’ Marcos Lamolla abrió la cuenta y tres minutos después, Brian Risso Patrón sentenció la historia ante Sportivo que así cerró la semana de su aniversario 103 de la peor forma. Más allá de lo numérico, Desamparados tendrá que resolver la parte anímica, la cual quedó muy golpeada hace dos fechas cuando perdió un partido increíble ante
Estudiantes por 2 a 1. En el futuro inmediato se viene para el puyutano Sol de Mayo, que se encuentra cuarto.