En un grupo clasificatorio conformado por Japón, Jamaica y Croacia, el seleccionado argentino empezó matando en su zona. Debut y triunfo contra Japón, goleada a Jamaica y victoria ante los croatas. En octavos de final, el gustito especial Argentina se lo dio frente a Inglaterra, con las manos de Angel Roa como héroe. En cuartos, le tocó cruzarse con Holanda. Empezó perdiendo, lo empató Piojo López y Dennis Bergkamp fue el verdugo para el fin de la ilusión.