Venía mal, pero quería revancha. No había corrido bien hace unos días en San Luis, donde fue sexto, y necesitaba una victoria como la que logró ayer para recuperar confianza y revalidar prestigio. Hidro Avión, el mismo caballo que ganó el año pasado, se quedó ayer con la 56ta. edición del Clásico Domingo Faustino Sarmiento. El hijo de Roy y Heavenly Smile, el que es propiedad de tres mendocinos y el sanjuanino Ricardo Oliva, logró algo que no ocurría desde 1995, cuado English Dib consumaba el último doblete.

Hidro Avión empleó 2m.15s.60/100 para cubrir los 2.000 metros sobre una pista blanda que fue minando la fortaleza de los ejemplares que dieron vida a una linda carrera disfrutada por, aproximadamente 8.000 espectadores.

En los analísis previos se tenía en cuenta a Hidro Avión, más por su prosapia y sangre que por sus últimos resultados. Los nombres del zaino sanjuanino Without Limits y del tordillo mendocino Privativo sonaban con más fuerzas. Sin embargo, a la hora de los bifes, fue el "petiso" del stud Las Divinas, el que copo la parada.

Con casi una hora de atraso con respecto al horario fijado en el programa, a las 17,28 se abrieron las puertas de los partidores. En el primer paso por el disco, casi a los 250 metros Hidro Avión no aparecía entre los primeros. Su compañero de yunta, Grigory, marcaba el camino seguido de cerca por los sanjuaninos Without Limits e Irroblar. Al llegar al codo de los 500 metros, Hidro Avión igualó la línea de quienes lo precedían y pasó al frente. Cuando restaban 1000 metros la diferencia que le había sacado al segundo, el tordillo Mr.Horse equivalía a unos diez cuerpos.

Un error del relator _confundido porque Hidro Avión llevaba el número 1A y Gregory, el 1_ hizo que mucha gente no se diera cuenta que el pingo que marcaba el ritmo era quien había ganado el año pasado.

Cuando entraron en la recta final, Mr. Horse intentó una arremetida pero se encontró con la serenidad del jockey Rubén Giménez y la sólida respuesta de un caballo necesitado de revancha, que en ningún momento le dio opciones para, siquiera discutirle el liderazgo.

La carrera más importante del turf sanjuanino tuvo un nivel acorde al marco que había en las gradas y se asemejó mucho a aquellas del siglo pasado cuando el hipódromo de Rivadavia mostraba sus mejores galas y al Sarmiento venían a cubrirlo los relatores que cubrían el Turf en radios como Rivadavia.

Con su victoria de ayer, contundente e inapelable, Hidro Avión se mete entre los grandes, ya igualó a English Dib y si está en buena forma el año próximo buscará emular al recordado Art Glass, ganador de cuatro clásicos al hilo.