Estudiantes y Gimnasia y Esgrima igualaron 0 a 0 en un partido intenso, trabado y parejo, con muy escasas emociones y con más miedo a perder que ganas de ganar.

En el balance, el Pincha debió haberse quedado con el triunfo, pero el Lobo supo aguantar los embates finales después de quedarse con un hombre menos por la expulsión de Harrinson Mancilla. El local tuvo dos chances muy claras, pero en la primera se lo negó el travesaño y luego Rodrigo Rey evitó el 1-0.

Una de las jugadas más claras del partido fue para Gimnasia. A los 11 del primer tiempo, Carbonero desbordó por la izquierda, y envió un centro atrás que apenas pudo desviar Andújar. Ramírez comenzó a saborear el 1 a 0, pero su remate lo desvió Godoy sobre la linea.

El dato saliente fue que después de 15 años y ocho meses el clásico platense volvió a jugarse en el estadio del Pincha.