Luka Modric festeja. Croacia avanza por penales a los cuartos de final del Mundial de Rusia 2018. El futbolista del Real Madrid junto a Ivan Rakitic son las principales figuras de un equipo que superó sin problemas a Argentina y sueña con llegar lejos ya que enfrentará a Rusia en la próxima ronda.
Nadie niega el talento de Luka Modric, uno de los 10 mejores futbolistas del mundo en la actualidad. La parte poco conocida del jugador de 32 años es que en su infancia vivió una verdadera pesadilla.
Nació en Zadar y se crió en la aldea Modrici, que terminó conformando su apellido. Cuando tenía seis años, siete ancianos fueron acribillados por un grupo de rebeldes serbios, a 500 metros de su casa, una organización guerrillera asesinaba a su abuelo.
El conflicto bélico hizo que su padre decidiera escaparse con su mujer y su hijo. Luka vivió mucho tiempo en hoteles que tenían habitaciones para refugiados y allí siguió desarrollando su talento. "Rompía más ventanas con el balón que las bombas serbias", aseguró un empleado del hotel en una entrevista con un diario croata.
Su padre tuvo que ir a la guerra, pero le pidió a Luka que se mantenga jugando al fútbol siempre. Tras la finalización de la guerra con la Operación Tormenta, los Modric se quedaron en Zadar y Luka ya era uno de los niños más talentosos de esa ciudad.
Como no se alimentaba de la mejor manera mientras era un refugiado, los ojeadores del Hajduk Split, uno de los equipos más importantes de Croacia, lo rechazaron por su pequeño físico. Él se mantuvo entrenando en un equipo del pueblo y Dinamo Zagreb aprovechó para llevarselo a sus inferiores con 16 años.
Tras dos cesiones exitosas en HSK Zrinjski (Bosnia) y NK Inter Zapresic (Croacia), en la temporada 2005/2006 se transformó en pieza importante del Dinamo. En 2008 se marchó al Tottenham por 20 millones de euros y en 2012, Real Madrid pagó más de 30 millones por él.
Sin el renombre de Lionel Messi o Cristiano Ronaldo, Modric demuestra con el balón en sus pies, que es uno de los futbolistas más talentosos del mundo en la actualidad y todavía sigue soñando con dejar a su país en lo más alto de un Mundial.