Liverpool se coronó ayer campeón de la Champions League al vencer, en la final inglesa, por 2 a 0 a Tottenham Hotspur, dirigido por el argentino Mauricio Pochettino, 

El egipcio Mohamed Salah de penal (2m.Pt) y el belga Divock Origi (42m.St), respectivamente, marcaron los goles del encuentro jugado en el estadio Wanda Metropolitano, en Madrid. 

Liverpool se puso en ventaja en el primer avance del partido, con un discutido penal cobrado a los 25 segundos que Salah transformó en gol. 

El desarrollo fue parejo, con algo más de tenencia de Tottenham. En ese trámite trabado y discreto fue el Liverpool el que generó algo de peligro. 

En el complemento se adelantó algo más Tottenham, que avanzó con pelotazos largos y cambios de frente, y se expuso al contragolpe rival al que le faltó justeza.

Se acercó el equipo de Pochettino con un cabezazo del defensor belga Jan Vertonghen que se fue sobre el travesaño.

En la respuesta el ingresado volante inglés James Milner remató desde lejos y el balón pasó junto al palo izquierdo de Lloris. 

Dentro de esa intrascendencia Tottenham tuvo una buena chance cuando Dele Alli recibió del coreano Heung-Min Son, quiso colocar la pelota sobre el arquero pero Alisson atrapó sin problemas, y después el propio Alli -exigido- cabeceó otra vez arriba. 

De inmediato, en una misma jugada, Allison respondió bien ante remates de Son y de Lucas Moura. 

Insistió Tottenham y cerca del final el arquero brasileño le sacó un buen tiro libre a Christian Eriksen. 

Pero en una respuesta aislada Liverpool sentenció la historia, cuando Origi recibió la pelota en el sector izquierdo del área y venció a Lloris con un remate cruzado y bajo.

Media docena

6 El Liverpool de Inglaterra ganó ayer su sexto título continental. Antes lo hizo en las temporadas: 1976/77; 1977/78; 1980/81; 1983/84 y 2004/05. La última al Milan de Italia.

Opinión

Ideas claras y convicción

Por Fabio Garbi

Hacen 371 días Liverpool perdió la final de la Champions con el Real Madrid comandado por Cristiano Ronaldo. Aunque dolorosa, esa derrota fortaleció el ánimo del equipo que dirige el alemán Jurgen Klopp.

Hasta Kiev había llegado apostando a un fútbol dinámico, ofensivo, de transiciones cortas y veloces desplazamientos.

La goleada que le propinó el Real no lo sacó de su eje. En esta Champions dio vuelta de manera inesperada la serie semifinal ante Barcelona y se acomodó en otra final por méritos propios. 

Al partido de ayer llegó como favorito y la fortuna que no tuvo hace un año en Ucrania lo acompañó desde los camarines en España. Salah transformó en gol un madrugador penal y selló la suerte de la final. En su fútbol lineal, rápido, práctico, moderno y efectivo chocó un Tottenham que tardó 85 minutos en sacarse la flema inglesa. Así, defendiendo con fe una idea, Liverpool conquistó Europa.