Está en su mejor momento. Lejos de su Chimbas natal, Matías Garrido tomó la dura decisión de emigrar del país y hoy en día no se arrepiente. Junto a su esposa y sus tres pequeñas, el "Gambetita" es una de las figuras del Club Olimpia Deportivo de Honduras, el club más popular del país centroamericano que tiene como director técnico al argentino Pedro Troglio.

La chance de probar suerte en el exterior le llegó después de quedar en las puertas del ascenso a Primera con Sarmiento de Junín. El sanjuanino, que venía de jugar en Patronato quería revancha y la buscó lejos de Argentina. Llegó a "Los Blancos" como se lo conoce al Olimpia, club que aspiraba al titulo en el campeonato de la Liga Nacional que no ganaba del 2015-2016. El sanjuanino a fuerza de talento y goles -como el que le marcó de tiro libre en el clásico ante Marathon-, hicieron que fuera consolidandose en el equipo de Troglio y también en el corazón de los hinchas hondureños, que en las redes sociales ya lo posicionan como uno de sus ídolos.

"Estoy pasando un gran momento deportivo y personal. Me hizo bien el cambio de aire y encontré un gran club donde nos tratan excelente, con varios argentinos. Gracias a Dios todo va saliendo bien y ahora esperemos que pase esto del Coronavirus para poder seguir peleando por nuestros objetivos", comentó el chimbero que aprovecha el "toque de queda" que se declaró en Honduras para disfrutar de su esposa Laura y sus hijas Josefina, Agostina y Julieta.

Garrido llegó en julio pasado y gracias a su gran actuación, le extendieron el contrato.

Garrido llegó en julio pasado y logró ser "Campeonísimo" ganando los dos torneos de la Liga. "Fue muy bueno porque el club lo necesitaba. Hicimos un campaña histórica con 44 puntos", comentó. Hace unos días, previo al parate del fútbol a nivel mundial, Garrido y su equipo estuvieron en Canadá para enfrentar al Impac Montreal, el equipo de Titi Henry con el que se midieron por la Conchampions. "Estamos en Cuartos por la Liga de la Conchampions, ganamos el primer partido por 2-1. La gente está muy contenta porque nunca se había pasado de fase, somos el único equipo centroamericano en esta instancia, vamos bien porque se armó un excelente grupo", analizó.

¿Qué diferencias tiene el fútbol hondureño con el argentino? Garrido así lo explicó: "Acá se juega cada tres días entonces el ritmo no es el mismo, es un ritmo menos. Hay un gran nivel, pero por ahí jugar tan seguido hace que los partidos no tengan la misma intensidad que en el fútbol argentino. Para mi está siendo una experiencia muy buena y la estoy disfrutando mucho".

Como siempre, el chimbero demostró su gratitud y le dedicó unas palabras a Troglio, su DT: "Pedro y su cuerpo técnico son excelentes personas, muy profesionales. Han venido con una idea muy clara a un fútbol que es muy distinto al de Argentina, tratan de inculcar nuevas cosas y transmitir lo que ellos pretenden que es un juego con intensidad, agresivo y con mucha dinámica". Por último, a sus 34 años Garrido sabe que ya transita quizás la parte más rica de su carrera pero todavía no piensa en el retiro: "Me gustaría jugar unos años más en el exterior y después volver a jugar a San Juan, no se donde pero sueño con retirarme ahí, en mi lugar", expresó.

Vida diferente


Si bien Matías Garrido y su familia se adaptaron rápido a la nueva vida en Honduras, la expansión del Covid-19 los obliga por estos días a estar encerrados. El país hondureño hace diez días que se declaró "toque de queda" por lo que no pueden ni salir a la puerta. "No hay supermercados ni farmacias, solo hay delivery de mercadería y medicamentos pero no podemos salir. Por suerte en el edificio en donde convivimos con otros argentinos tenemos gimnasio así que tratamos de entrenarnos acá", expresó.

Después que pase todo y el mundo se acomode, la familia Garrido volverá a la rutina. Matías cuenta que las chicas se adaptaron rápido a un sistema educativo más complejo al de Argentina. "Si bien José está por pasar a Primer Grado y las mellis están en Prejardín, la educación es avanzada, el ingles es avanzado y eso es lo que mas les costó pero están felices de estar acá".