"Maruca" (83) estaba convencida de que el incendio "selectivo" que sufrieron en una habitación, "fue obra de Dios" y lo mismo pensaba su hermana Nelly (76) que es asmática e hipoacúsica. Ocurrió ayer a las 3,30 en el dormitorio de "Maruca", cuando la mujer se bañaba. Hubo desesperación, porque se cortó la luz y todo se llenó de humo. Y resultó muy extraño, porque las llamas consumieron algunas cosas, como el naylon que cubría un cesto con ropa, pero no las prendas. Pareció pasar debajo de una cama para quemar un velador (no la mesa de luz) y un sombrero. El techo de cañas tampoco resultó muy afectado. Los vecinos evitaron que el siniestro fuera más dañino.