El último sábado parece representar un quiebre en el dramático problema de los animales sueltos en un peligroso tramo de unos 25 km. en la ruta 141, entre el control policial de Bermejo y las Sierras de Marayes, en Caucete. Ese día una familia sanjuanina que iba a Catamarca chocó, mató a una vaca y se salvó de milagro: fue el tercer choque similar en la zona con resultados afortunados, en apenas 10 días. Ese día también, la jefatura de policía instaló una casilla y una patrulla fija en la zona para prevenir y controlar. Y desde ese día no volvieron a aparecer los animales por la ruta, dijeron en la Policía. Es más, días después la jefatura de policía generó reuniones con puesteros y gente de la Secretaría de Producción y surgieron las primeras propuestas para empezar a dar soluciones al conflictivo asunto.
¿Qué planean hacer? construir (pedirán ayuda municipal) dos lagunas a ambos costados pero a la vez lejos de la ruta 141 para evitar que los animales (los puesteros dijeron que son de otro lugar, de 25 de Mayo) se crucen. Y se cruzan porque las aguadas con la poca agua del lugar se hacen naturalmente al lado de la ruta, a la altura del km. 132, justamente donde chocó la última familia.
Y si los animales se cruzan de todos modos estará la patrulla de la policía rural, movilidades de Asuntos Ganaderos y hasta baqueanos que podrían ser contratados para hacer rastrillajes y capturar a los animales para llevarlos hasta un corral a instalar en la misma zona de Bermejo (conocida como Laguna Seca) para evitar el traslado de los puesteros hasta Trinidad, Capital, que es donde iban a parar luego de ser incautados.
Uno de los principales gestores en la solución del problema, el jefe de policía, comisario general (RE) Miguel González, aseguró también que los puesteros se comprometieron a relevar, marcar y custodiar debidamente a sus animales. En las reuniones también volvió a mencionarse la posibilidad de alambrar ambos costados de la ruta y poner boyeros con corriente.
Esos fueron los puntos salientes de tres reuniones: La que realizó el jefe de la Unidad Regional Este, comisario mayor Aldo Baigorrí, con gente de la zona de San Expedito y unos 15 puesteros de Laguna Seca (ambas en Bermejo). Y otra entre el mismo jefe de policía con el secretario de Producción Marcelo Alós, y el director de Asuntos Agropecuarios Hugo Berenguer.
"A los puesteros se intentó concientizarlos de que deben tener sus animales marcados y se les reiteró la advertencia de que deben custodiarlos o caso contrario serán secuestrados y deberán pagar una multa y los gastos por el tiempo que el animal esté incautado. Y se mostraron de acuerdo en colaborar. Con estas medidas esperamos controlar el problema hasta que haya una solución definitiva", dijo ayer González.