Es un tanto insólito lo que denuncia una mujer de Pocito: que su hijo de 20 años es detenido todos los domingos en el Parque de Mayo, sin motivos razonables. Dijo que ya lo aprehendieron en ese lugar al menos 15 veces, en ocasiones apenas bajaba del colectivo, y acusa que el muchacho tuvo que abandonar la escuela por culpa del hostigamiento policial.

Es la versión de una madre (pidió no ser identificada, por temor a represalias) que dice estar desesperada y con mucha bronca por la situación que atraviesa su hijo. La enésima caída del joven fue el domingo pasado, por la tarde. "Apenas bajó del colectivo se le fueron encima y se lo llevaron a la comisaría 4ta", se quejó. Ella esa vez se encontraba allí en el Parque, junto a su hija de 22 años. "Dije 'voy a ir para ver si es cierto'. Yo me fui antes y él se subió al colectivo siguiente. Cuando me llama, me pregunta dónde estoy, le digo que en el Parque y me dice que acababa de llegar pero que lo había detenido la Policía. Se bajó del colectivo, caminó unos pasos y de atrás lo agarraron del cuello. Lo tienen marcado, no puede ser, es todos los domingos, lo ven bajar del colectivo y ahí nomás se lo llevan a la 4ta. No puede ser que sea así todos los fines de semana", advirtió.

"Se lo llevan con cualquier excusa, a veces dicen que es porque lo pillan con porros y es mentira", manifestó la madre. Agregó que el joven suele ir con algunos amigos, pero que siempre lo detienen sólo a él. Y que en la comisaría 4ta, que tiene jurisdicción en la zona del Parque de Mayo, lo tienen, en promedio, menos de media ahora. Luego de eso lo sueltan.

"Él siempre va los domingos, con amigos, con la novia. Pero siempre lo mismo, es impresionante, todos los domingos igual, ya van más de 15 veces que pasa lo mismo. Creo que en los últimos meses, se habrá salvado una o dos veces y yo decía 'Gloria a Dios'. Si no me llama él me llaman los amigos para avisarme que está preso". Agregó que las primeras veces, cuando estaba a su alcance, iba por la seccional a tratar de solucionar o hablar para sacarlo de manera rápida. Pero que, como ya se hizo una costumbre, casi que dejó de ir.

Sobre el joven pesa una condena

"Los muchachos no molestan, van a divertirse. Este mismo domingo a un hombre le robaron un bolso y los policías no hicieron nada. Se fijan en cosas en las que no deberían y no en las importantes", criticó la mujer.

Es importante mencionar que sobre el muchacho pesa una condena impuesta en el fuero Flagrancia en diciembre del 2021. Fue por un hecho ocurrido a primera hora del día 13 de ese mes. Según su madre, al joven lo acusaron de robar un celular a una chica cerca de su casa, en el Lote Hogar 27 de Pocito, "pero no le encontraron nada". Sin embargo, en Flagrancia le impusieron una pena de 3 años de cárcel.

"Hasta ese momento no tenía antecedentes. Somos una familia de bien, de trabajo, no tenemos problemas con nadie. Pero bueno, pasó", expresó la mujer. Su hijo permaneció un mes y medio en los calabozos de la subcomisaría Ansilta y luego lo pasaron al Penal de Chimbas. En ese lugar estuvo 8 meses, hasta mediados de agosto del año pasado, cuando le otorgaron la libertad condicional.

Sin embargo, lejos de significar un alivio, parece que el calvario sigue, de acuerdo a lo denunciado por su entorno. 

"Él siente mucha bronca. Para poder salir debe hacerlo conmigo o con el padre. No puede andar solo, no puede hacer una vida normal", manifestó.

Según la madre, la situación que se da en el Parque suele ocurrir también en las inmediaciones de su vivienda. "Ya pasó, salía afuera y ya se lo llevaban por contravención. Mi hijo casi que no puede salir, parece un prisionero adentro de mi casa, porque sale hasta la vereda, pasa la Policía y se lo lleva".

"Me ha pasado en la comisaría que me mienten o se me ríen en la cara"

"A la escuela (cursaba un plan para terminar la Secundaria) no pudo ir más porque en vez de ir a buscarlo ahí iba a buscarlo a la comisaría", contó, con bronca. Dijo que ahora sale a trabajar con su esposo, el padre, que se dedica a la construcción y a la pintura. "Llega a las 6 de la tarde, se baña y sale ahí a la vereda, yo le digo que parece un niño enfermo. Lo que pasa es que tiene miedo de que se lo lleven, y mi temor es que le inventen algo y lo manden de nuevo al Penal".

"Yo a veces lloro, es tan grande la impotencia. Y a los que se tienen que llevar no se los llevan. A mi hijo preguntale los códigos de la Policía... se los sabe a todos. De todas las veces que lo han tenido en la comisaría ya conoce todo, es como si hubiese estado estudiando ahí adentro".

Para cerrar, la mujer advirtió que si la situación continúa, denunciará el caso ante la Subsecretaría de Control de Gestión de la Seguridad Pública. "Que lo dejen tranquilo, que no lo molesten más. Sólo eso pido, que mi hijo tenga una libertad verdadera, que pueda ir al Parque tranquilo. No es un delincuente", concluyó.