El ingeniero Adolfo Esteban Avendaño fue desligado ayer con un sobreseimiento de su presunta vinculación con el homicidio culposo del operario Fabricio Manuel González Meza, quien se electrocutó en el interior de la fábrica de vidrios Cattorini, en Santa Lucía, alrededor de las 19 del 9 de enero pasado. Según el fiscal Renato Roca y el ayudante fiscal Maximiliano Gerarduzzi (UFI de Delitos Especiales), hubo una multiplicidad de factores y causas que llevaron a ese desenlace mortal, que no podían atribuirse exclusivamente a Avendaño. Todo pasó cuando el operario regó y el agua tomó contacto con el cable de un motor con cinta aisladora. Además, no había cable a tierra y faltaba el disyuntor.