La alarma dio el aviso a eso de las 3 de ayer, pero uno de los responsables del estudio jurídico resolvió no acudir porque habían sido numerosas las veces que llegó y descubrió que el problema era otro, como un corte de electricidad, explicó uno de los damnificados. Sin embargo cuando llegó, ayer por la mañana, se topó con una indignante explicación: ladrones. Rompieron la bocina de la alarma, abrieron la puerta a patadas y, adentro, revisaron las cinco oficinas hasta huir con lo que hallaron a mano, dos computadoras y unos $10.000.

El hecho ocurrió en General Paz y Jujuy (esquina suroeste), Capital, y se sumó a una seguidilla de ataques que, con el de ayer, sumaron seis en los últimos dos meses, dijeron los vecinos. Todo sin contar otros asaltos y robos en las casas en la misma zona.

Según los vecinos, los otros robos los sufrieron el estudio jurídico Bloise, las casas de un psiquiatra de apellido Apud y la de otro vecino de apellido Imparado, un asalto con armas a una comerciante y hace unos días, el 23 de mayo, al comercio de la familia Torés en la esquina opuesta al estudio jurídico atacado ayer.

Hacía tres días que ese comercio había abierto sus puertas y el saqueo que sufrió fue importante: todos los fiambres, cigarrillos, cervezas, fernet y algo de dinero para dar cambio, explicaron los Torés.

"Es hora de que hagan algo, porque aquí parece tierra de nadie y eso que estamos en pleno centro", se quejaron.