La mañana de este miércoles dio inicio a la audiencia en Sala D de Flagrancia contra Juan Carlos Camuñas González, el reconocido bodeguero y enólogo sanjuanino acusado de haber agredido brutalmente a su pareja en el interior de una camioneta. El profesional recuperó la libertad tras la excarcelación otorgada por el juez Ricardo Moine, a pesar de que el fiscal del caso, Alberto Martínez, había solicitado que quede detenido con prisión preventiva hasta el comienzo del juicio. El imputado verá a un nuevo juez el 5 de diciembre, cuando empiece el debate oral donde la fiscalía Flagrancia presentará todas las pruebas en contra y también declarará la víctima.

La llamada audiencia de presentación fue presidida por el juez Ricardo Moine, mientras que la acusación estuvo encabezada por el fiscal Alberto Martínez. En tanto, la defensa del profesional quedó en manos del abogado particular Federico Petrignani.

Martínez, junto con su ayudante fiscal, formuló los hechos y las pruebas en su contra. En un momento, Camuñas González, en un estado de evidente nerviosismo, interrumpió al fiscal al no gustarle lo que había escuchado de la teoría fiscal, pero el juez le solicitó que mantuviera silencio. “Es la primera vez que me pasa esto, no sé que hacer”, atinó el acusado. Si bien tuvo después la oportunidad de aclarar y dar su versión de los hechos, cuando el magistrado le dio la palabra, Camuñas González eligió abstenerce.

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Camuñas González se abstuvo de declarar durante la audiencia de presentanción.

Por su parte, el abogado defensor, al momento de plantear su postura, solicitó que el caso no fuera llevado por el Sistema Especial de Flagrancia, sino que interviniera la UFI Cavig, debido a que había una denuncia allá de la víctima y el caso requería un estudio más complejo, porque no era primer episodio que habían mantenido la denunciante y su defendido. “El caso requiere que se periten los teléfonos celulares y buscar testigos de la compleja relación que tenía la pareja”, dijo Petrignani.

Sin embargo, el juez Ricardo Moine, rechazó el planteo de la defensa, a raíz de que el hecho fue flagrante, y que toda esa prueba se podía producir en el juicio.

Luego el fiscal Alberto Martínez solicitó la prisión preventiva para el bodeguero hasta el viernes 5 de diciembre cuando comience la audiencia de finalización, lo que es en el sistema acusatorio el juicio, pero Moine no aceptó la medida y ordenó la excarcelación del imputado, considerando que no había peligro en la investigación y que el enólogo no se iba a fugar.

Sobre el final Martínez adelantó ante el juez los testigos que iban a declarar en el juicio, pero señaló que hay un problema para rastrear al hombre que llamó al 911 e hizo la denuncia que derivó en la detención de Camuñas González. Según indicaron fuentes judiciales a Diario de Cuyo, de persisitr la falta de colaboración de este testigo, lo harán comparecer con la fuerza pública.

Camuñas, propietario de Finca Camuñas, especialista en vinos de autor y profesor de Enología, quedó en el centro de un grave caso de violencia ocurrido durante la madrugada del lunes 24 de noviembre en Pocito. Su detención se produjo luego de que fuera sorprendido golpeando a su pareja en su camioneta, estacionada en un sector oscuro de la zona de Vidart antes de Calle 9.

Todo comenzó cerca de la 1.40 de la madrugada, cuando un llamado al 911 alertó sobre una camioneta estacionada en un área poco iluminada, donde un hombre estaría agrediendo a una mujer. Al llegar, los policías encontraron una Toyota Hilux con Camuñas en el asiento del conductor. Él aseguró que estaba solo, pero la versión se desmoronó al revisar el interior del vehículo.

En los asientos traseros, los efectivos hallaron a una mujer de 34 años, identificada como E.G., quien estaba en estado de shock, con lesiones visibles, la boca lastimada, tierra en su ropa y marcas compatibles con una golpiza. Presentaba heridas en el rostro, cuello, espalda, brazos y piernas, además de un fuerte cuadro nervioso.

En el lugar intervino el ayudante fiscal Andrés Cerutti, junto al personal médico del 107, que asistió a la víctima.

Horas después, la pareja del agresor y víctima radicó la denuncia formal en la UFI Cavig, según confirmaron fuentes judiciales a este medio.