Desde el 26 de este mes, el fuero penal comenzará a transitar un cambio histórico, ya que empezará a funcionar el sistema acusatorio. Se trata del mecanismo en el que la investigación de los hechos delictivos estará en poder de los fiscales, tarea que tenían los jueces, quienes, con la modificación, serán contralores de las garantías constitucionales de los sospechosos y los encargados de su juzgamiento. La definición la dio a conocer la presidente de la Corte de Justicia, Adriana García Nieto, luego de una reunión que mantuvo ayer con sus pares y el fiscal General. La puesta en marcha del procedimiento lo hará con el estreno de la refuncionalización del edificio 25 de Mayo, el cual atravesó una remodelación de cerca del 50 por ciento de sus instalaciones para albergar la estructura del acusatorio y a los magistrados. Por todo ello, habrá un acto oficial que contará con la presencia del gobernador Sergio Uñac.

La implementación del sistema se diseñó como una política de Estado, en la que hubo una fuerte decisión de la gestión uñaquista de ponerlo en práctica, en conjunto con el trabajo de especialistas del Poder Judicial para armar el Código Procesal Penal y el tratamiento legislativo en la Cámara de Diputados para plasmar los cambios en normativas.

El acusatorio apunta a que se resuelvan muchas más causas y de manera más rápida en un fuero tan sensible como el penal. El sistema que rige actualmente tiene un nivel de resolución de expedientes que apenas roza el 9 por ciento por año, según las estadísticas de la Corte, lo que le ha valido la calificación de ser un mecanismo vetusto y colapsado. Su esquema se denomina inquisitivo mixto. Inquisitivo porque, en primera instancia, el juez investiga y decide la presunta responsabilidad del imputado. Y mixto porque, en la etapa de juicio, el fiscal acusa y los camaristas condenan o absuelven. En ese esquema, en la primera fase, hay un sólo juez que durante 15 días investiga absolutamente todos los delitos, por lo que se ve desbordado y prioriza los casos con detenidos y los de alto impacto social. Así, el resto, en su mayoría, queda en la nada.

Con el acusatorio, en primer lugar, se corrigen las funciones, dado que los fiscales, con el apoyo policial, investigarán los hechos y pedirán medidas contra los sospechosos (allanamientos, secuestros y detenciones), a los que, luego, en base a las pruebas, acusarán ante los jueces. Estos darán el visto bueno o no a los procedimientos y, luego, juzgarán a los imputados.

En segundo lugar, y como eje central, el acusatorio tendrá cuatro Unidades Fiscales de Investigación (UFI), con una batería de magistrados que llevarán las causas de violencia intrafamiliar y de género, de abusos sexuales contra menores y asesinatos y homicidios culposos, entre otros.

El edificio 25 de Mayo contendrá a la UFI Delitos Especiales, el Colegio de Jueces, los magistrados que siguen con las causas del viejo sistema, las salas de audiencias y de juicios, por lo que se viene llevando adelante una remodelación que ya tiene un avance del "90 por ciento", indicó la presidente de la Corte. Además, agregó que "los recursos humanos están capacitándose y ya está el sistema informático. Por eso, necesitamos unos días para hacer los reajustes en ubicación y mobiliario". También explicó que el inicio del acusatorio será el 26 al resaltar que "vamos a tener una capacitación intensiva en los sistemas informáticos del acusatorio por parte del Departamento Informático del Poder Judicial de Río Negro del 11 al 19, que se puede extender al 23 de este mes".

Coexistencia de sistemas

Viejo esquema

Desde el 1 de febrero hasta el inicio del acusatorio, dos jueces Correccionales y dos de Instrucción han seguido con la investigación tradicional de todos los hechos delictivos. Cuando empiece el acusatorio, tendrán menos causas, ya que varios delitos pasarán al nuevo esquema, y continuarán con sus expedientes.

Unidades fiscales

La UFI Cavig tramitará los casos de violencia intrafamiliar y de género. La UFI Anivi investigará los abusos sexuales contra menores, mientras que la de Delitos Especiales llevará los asesinatos, los homicidios culposos (accidentes de tránsito) y los delitos contra la administración pública. Ya estaba la UFI Flagrancia.

Unidad conclusiva

Como tres jueces Correccionales y tres de Instrucción pasaron al acusatorio, la Corte creó la Unidad Conclusiva para tramitar las causas pendientes. Según había indicado García Nieto, dicha área trabajará unos 10 mil expedientes. Los titulares serán los magistrados que quedaron en el viejo sistema y los de Flagrancia.

Herramientas

Los fiscales tendrán alternativas como la reparación integral del daño ante ciertos delitos, la mediación y la conciliación entre las partes, la aplicación del principio de oportunidad para dejar de lado hechos sin gravedad, aunque la víctima podrá seguir de manera particular el caso, además de la probation y el juicio abreviado.

Continuidad

La presidente de la Corte, Adriana García Nieto, explicó que los jueces Correccionales y los de Cámara que, a la fecha de la puesta en marcha del acusatorio, estén en condiciones de hacer juicios y su actuación esté confirmada, deberán realizarlos, independientemente en qué mecanismo se encuentren.

Personal

Para poner en marcha el sistema acusatorio, la Cámara de Diputados designó a 30 magistrados en diciembre. Además, la Corte incorporó funcionarios a través de un concurso externo y personal por medio del examen que se hizo en 2018. También llevó a cabo un concurso interno para el ascenso de empleados.