La renuncia del presidente del Tribunal de Cuentas, Isaac Abecasis, tomó ayer estado parlamentario y los diputados no la trataron, sino que se definió que pase a la Comisión de Legislación y Asuntos Constitucionales. De esa manera, se estira la partida del titular del organismo encargado del control del gasto público y, por ende, el arribo de su reemplazante, el que surgirá a propuesta del Poder Ejecutivo y la elección final por parte de la Legislatura. Es un hecho que el sucesor se designará en la actual gestión y lo que resta saber es quién impulsa el Gobierno y cuándo se producirá su nombramiento.

Abecasis asumió en 2004 en el Tribunal de Cuentas y el 31 de octubre del año pasado le había revelado a este medio que había iniciado los trámites para jubilarse. Luego de un extenso procedimiento, el propio funcionario confirmó el 4 de agosto que la Anses le concedió el beneficio y que quedaba a la espera a que la Cámara de Diputados aceptara su dimisión. Como los legisladores decidieron en la reunión de Labor Parlamentaria del martes que su renuncia pase a Comisión, lo que se confirmó ayer, su partida aún no se producirá y seguirá en funciones. Ahora, en la Legislatura deberán decidir cuándo vuelven a sesionar (entre la última y la anterior pasaron 28 días) para aceptarle la renuncia. Con ese paso, se notifica al titular del organismo y al Poder Ejecutivo para que escoja a su reemplazante, cuyo pliego es elevado a la Cámara para que se produzca la designación en una nueva sesión. La designación en dicho cargo estuvo en la picota cuando el vicegobernador electo Fabián Martín cuestionó en Radio Sarmiento que la gestión uñaquista buscaba poner sus funcionarios en el organismo de control y en puestos de magistrados que se están concursando en el Poder Judicial.

El puesto es clave, ya que está a la cabeza del organismo encargado del control posterior del gasto público (ya ejecutado) de las reparticiones del Gobierno, empresas del Estado, entes descentralizados y los municipios. Si los funcionarios no pueden justificar con documentación las erogaciones públicas, el Tribunal los declara responsables patrimonialmente y deben devolver el dinero de sus bolsillos. El sucesor de Abecasis tiene que tener al menos 30 años de edad y ser abogado o abogada con 10 años de ejercicio en la profesión.

Había circulado la versión que la vicepresidenta Graciela Chavez también va camino a jubilarse, pero la funcionaria ha evitado el contacto ante el requerimiento periodístico. El organismo, además, se compone de un vocal permanente, que actualmente ejerce Aldo Molina. Los tres conservan sus cargos mientras "dure su buena conducta", según establece la Constitución, y sólo pueden ser desplazados a través de un juicio encarado por el Jurado de Enjuiciamiento. Después, están los vocales transitorios, los que permanecen en sus puestos por cuatro años y también son designados por la Cámara, pero a propuesta de los bloques legislativos en primera y segunda minoría. Esos lugares, en principio, les corresponderían a Producción y Trabajo y al bloquismo.