-¿El crecimiento de los hechos denunciados puede leerse como una tendencia en aumento de violencia escolar?
-No sé si es una proyección, porque a veces surgen conflictos sociales en algunos sectores que son más habituales que en otros, pero luego van cambiando. Pero sí es verdad que este año hemos tenido casos de público conocimiento en los que incluso seguimos trabajando, como la agresión que hubo en 9 de Julio, para que no vuelvan a ocurrir. Los hechos van apareciendo y si me preguntan cual es el que lleva mayor tratamiento digo que todos y cualquiera, porque una agresión verbal o una diferencia empiezan por algo y si no le damos tratamiento inmediato se complica luego.
-La gente denuncia más y los padres incluso se acercan más a los medios que a las escuelas o al Ministerio.
-A veces porque dicen que no encuentran respuesta adecuada en donde la buscan y que entonces salen a los medios para que se actúe.
-Los padres deben recurrir a la institución educativa y entre todos contener y proteger a nuestros niños. No quiere decir que no puedan ir a los medios, porque no se trata de tapar la situación.
-Estamos trabajando con los equipos que tenemos. Pero para 2015 proyectamos ampliar la presencia de gabinetes en las escuelas y trataremos de que haya más tutorías, con talleres integrados por profesionales que puedan brindarle ayuda a los alumnos. Estos son mecanismos a futuro, hoy estamos trabajando con lo que tenemos.
-Ponemos toda la voluntad y creo que estamos trabajando fuertemente. Pero si todos no ponemos el mismo esfuerzo y voluntad será difícil lograrlo. El Ministerio solo, un director o una maestra solos no pueden conseguirlo, porque tenemos que estar acompañados por la familia..
-Puede que sea fuera de las escuelas, pero los chicos estuvieron antes adentro y eso nos incumbe. Además, un hecho de agresión afuera genera un quiebre en la relación que impacta en la escuela. Por eso debemos hacer un tratamiento, análisis y acompañamiento. De nada vale que los sancionemos, que los expulsemos y que tomemos medidas disciplinarias si a esos alumnos nos les damos las herramientas para que puedan mejorar sus actitudes.
-La sociedad puede decir que podemos sancionar, pero nosotros como sistema educativo tenemos que garantizar que los alumnos estén donde deben estar, que es en las instituciones educativas. Y desde ahí enseñarles a transitar el diálogo y la convivencia dentro de un sistema democrático.
-La escuela ha cambiado, pero vivimos en otro momento, diferente. Yo no creo que la escuela sea más violenta que antes, sino que hay más difusión de lo que pasa.