DIARIO DE CUYO trató ayer de comunicarse con Carlos Balaguer, pero desde su entorno íntimo aseguraron que no iba a hacer declaraciones. Sin embargo, sus familiares hablaron, aunque pidieron expresamente el anonimato. En todo momento remarcaron que no padece una enfermedad o inconveniente médico que le impidiera seguir en su puesto. De todas formas, sí reconocieron que tiene algunos problemas por los años (cumplió 77) aunque evitaron dar detalles. En cambio, aseguraron que estaba cansado y que el hecho de asumir la presidencia iba a resultar una pesada carga. Además, manifestaron que ya había cumplido una etapa y que ésta era la mejor oportunidad para irse. En su círculo más cercano dijeron que la opinión de su esposa y sus hijos tuvo un rol central a la hora de tomar la decisión de dar un paso al costado.
A las 9 de ayer, Balaguer subió al segundo piso del Palacio de Tribunales y estampó su firma en el escrito en el que presentaba su renuncia dirigida a su colega y presidente de la Corte de Justicia, Abel Soria Vega (Ver foto). En el Poder Judicial señalaron que lo vieron tranquilo y en buen estado. Tras renunciar, regresó a descansar a su casa, dijeron en su entorno.
Balaguer viene cumpliendo tareas en la Justicia desde hace unos 40 años y hace 21 que es ministro de la Corte. Asumió el 24 de mayo de 1994, junto a Humberto Medina Palá. En 1995 juraron Adolfo Caballero y Juan Carlos Caballero Vial y al año siguiente desembarcó Abel Soria Vega.
Tras la dimisión del ministro, desde el máximo tribunal inmediatamente enviaron el escrito a la Cámara de Diputados, en donde quedó asentada en la mesa de entradas, indicaron las fuentes.