La industria bodeguera se encamina a cerrar un año con la copa en alto. Se estima que en el 2020 los despachos de vinos al mercado interno rondarán los 940 millones de litros, que significarán 59,8 millones de litros más que lo consumido en el 2019. La cifra se asemeja al consumo de hace cuatro años, en el 2016, cuando se alcanzaron los 941,6 millones de litros de despachos al mercado doméstico. Pese a la pandemia, que deprimió varios sectores de la economía, la del vino es una de las pocas actividades que gracias a ese aislamiento se apronta a cerrar con un alza aproximada del 6,78% respecto al año pasado. Es decir, casi dos puntos porcentuales más que la suba del 2019. En el sector todos coinciden en que se bebió más vino por el aislamiento, sumado a precios muy competitivos frente a su principal competidor, la cerveza. Hacia el 2021 las expectativas están divididas, entre quienes proyectan que seguirá el crecimiento y referentes viñateros que vaticinan un amesetamiento del consumo porque la cosecha en volumen será menor, habrá menos vino y este subirá de precio. Las proyecciones anuales se hicieron con los datos de consumo a noviembre, publicados ayer por el INV (ver aparte), que dan cuenta que en 11 meses se consumieron 867.190.800 litros de vinos, de los cuales 75.3 millones de litros se dieron en noviembre. Suponiendo que se repita idéntico consumo en diciembre (todos dicen que será mucho más por las fiestas de fin de año) se llega a los más de 940 millones de litros proyectados en el 2020.

Hugo Carmona, vicepresidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura, se mostró optimista y consideró que el consumo puede seguir creciendo, alentado por la incorporación de nuevos envases como la lata, la recuperación de la damajuana y la venta en bodega. Eso sí, la expansión también está atada a que se realicen inversiones en fábricas de botellas de vidrio, porque en la actualidad hay faltantes para las bodegas pymes. ""Este año el consumo se acerca al del año 2016, con lo cual podemos apuntar a llegar a los dos mil millones de litros que se vendieron en el 2015", dijo el funcionario. Alentó además a trabajar en lograr un sector primario fuerte, recuperar los viñedos para tener uva y consideró clave, para ello, continuar con las mismas políticas público-privadas nacionales y provinciales. Ángel Leotta, presidente de la Cámara Vitivinícola, dijo que el 2020 fue "muy positivo", con crecimientos en consumo interno, exportaciones y granel. ""Nos da un ánimo mucho más alentador para este 2021, y creemos que podemos seguir ganando puntos en el consumo interno", dijo. Juan José Ramos, desde la Asociación de Viñateros Independientes, opinó que el consumo se mantendrá, no crecerá; por efecto de la merma esperada en la cosecha de uvas, y un aumento en el precio del vino. En coincidencia, Pablo Martín, desde la Mesa Vitivinícola, cree que se entrará en una meseta teniendo en cuenta que vamos a tener una cosecha inferior a la del 2020, este año se consumió prácticamente el vino excedente de 2019 y se llegará a junio próximo con existencias mínimas. ""Por una cuestión de ajustes de precio los consumos no van a ser mayores debido a que no va a haber producción", dijo.

Enero-noviembre 2020

6,8 por ciento aumentó el consumo de vinos en 11 meses del 2020, comparado con igual lapso del 2019. En noviembre el despacho al mercado interno tuvo una leve baja del 2,6%.

Los envases

37,1 por ciento subió la venta de vino bag in box entre enero y noviembre. Le sigue el botellón de 1,5 lt, con un 37%, la damajuana creció 14,8% y la botella el 13,2%. El tetra cayó 3,5%

Las exportaciones, también en aumento


Se vendió en once meses 93 millones de litros más de vino al exterior, un aumento del 34,1% comparado con el mismo periodo de 2019, según cifras del INV. Los vinos fraccionados contribuyeron con un crecimiento del 6,1% y los graneles con un 84,7% para lograr este resultado. Así Argentina totalizó, en los once meses analizados, ventas en el mercado externo por un volumen de 369.282.300 litros superando en más de 93 millones de litros a igual periodo de 2019. Este desempeño en el comercio internacional le permitió a la Argentina escalar posiciones en el ranking mundial de países exportadores, pasando del puesto 11 que venía sosteniendo, al 8 a nivel global. En cuanto al tipo de vinos los sin mención varietal representan el 61,5% y los varietales el 23,4%.