Durante estas dos décadas se repiten episodios de crisis comerciales entre Argentina y Brasil, así como demandas de Paraguay y Uruguay por las asimetrías ante las economías de sus socios de mayor tamaño.

La aprobación de un código aduanero debe ser un paso importante para la integración económica, con la eliminación del arancel externo, algo muy sensible para Paraguay por su condición de país sin salida al mar.

La última queja ha sido motivada a finales de febrero pasado por una normativa proteccionista argentina que amplía el universo de productos a los cuales se aplican unas licencias no automáticas para su ingreso a ese país.

La resolución en la práctica no impide la importación de esos artículos pero demora hasta 60 días su ingreso en el país. Exportadores de Brasil y hasta el propio presidente uruguayo protestaron por la medida.