El caudal de agua que corrió por las calles del centro fue tan inusual que obligó a un trabajo conjunto entre el Departamento de Hidráulica y la Municipalidad de la Capital para solucionar el problema.

“A las 6 de la mañana, el canal Valdivia, que corre paralelo a la Avenida Ignacio de la Roza, en la altura de la Circunvalación, se tapó con hojas, ramas y basura. Por eso, el agua comenzó a correr por la Central, derivó en el resto de las calles, como lo hace cuando llueve, y se escurrió en las acequias que funcionan como drenaje”, explicó Jorge Millón, titular de la Dirección de Hidráulica. Y agregó que “ya otras veces el canal se ha desbordado, aunque nunca con esta magnitud. El viento fue tan fuerte que también se rebasaron canales en Rawson y Pocito, aunque fueron canales de menor caudal”. Millón comentó también que, para frenar el río que corría por las calles, tuvieron que cortar el agua en el partidor San Emiliano, que está en Marquesado. Pero el proceso de corte del sistema demanda unas dos horas, por lo que, hasta las 7, el agua siguió copando las arterias de la ciudad.

Sobre el tema, Juan Pablo Quattropani, secretario de Obras de la Municipalidad de la Capital, comentó que “esto fue una circunstancia ajena al municipio. Quedó inundada un cuarto de la ciudad, pero fue por el desborde del canal de riego, que corresponde a Hidráulica”. A pesar de esto, ambos organismos trabajaron juntos para sacar la reja del canal, destaparlo y evitar que el agua siguiera derramándose.

Quattropani contó también que en las últimas semanas han tenido problemas de cunetas de riego del arbolado rebasadas (las cuales sí competen a la Municipalidad), que inundaron algunas calles de la ciudad, aunque en menor medida. “En la época de monda limpiamos 60 km de cunetas en el microcentro y 120 en todo el departamento. Cada vez que largamos el agua, las vamos limpiando. Y a la semana siguiente tenemos que volver a hacer lo mismo porque las cunetas están tan sucias que parece que no las hemos limpiado en meses”, dijo el funcionario. Y agregó que “el problema es que la gente tira basura en cualquier lado, o saca la basura fuera del horario de recolección, los perros la desparraman y termina en las cunetas tapando el paso del agua”.