Mario Ariel Bolatti, un cordobés nacido en la localidad de La Para el 17 de febrero de 1985, vivió ayer una noche mágica. Es que a los 39´ del complemento, exactamente cuatro minutos después de haber entrado a la cancha reemplazando a Higuaín, marcó el gol argentino. El que aseguró definitivamente el pasaporte al Mundial de Sudáfrica del año que viene. Y lo festejó a mil. “La verdad que ni me acuerdo en quién ni en qué pensé. Sólo quería festejar”, dijo el rubio volante central cuando se retiraba del estadio Centenario. Y razón no le faltaba. Debutó en el seleccionado argentino el 12 de agosto de este año, cuando la Argentina le ganó 3-2 en un amistoso a Rusia. Fue por su gran desempeño en Huracán. El equipo con el que se consagró subcampeón en el Clausura 2009. Bolatti había debutado en la primera en Belgrano de Córdoba. Jugando el torneo de la B Nacional del 2003. Tres años después logró el ascenso a Primera División con el Pirata, siendo una de sus figuras. En el 2007 fue transferido al Porto de Portugal y dos años después, al no ser tenido en cuenta en el club lusitano, regresó a la Argentina para jugar en el Globito. Casi como un ascenso meteórico. Ayer Maradona lo llamó para que reemplace al Pipita. El cordobés contó que Diego le dijo “jugá bien metido en el medio. Ayudalo a Mascherano, para que la Bruja tenga más libertad. Después casi ni tuve tiempo de acomodarme y llegó el gol…” Bolatti metido en el área para cabecear el centro que iba a llegar desde la derecha contó con la diosa fortuna para convertir. Messi jugó para Verón, éste pateó al arco y la pelota fue desviada por un defensor. Le cayó a él, la dominó y metió el derechazo goleador. Así se convirtió en el héroe del Centenario del 14 de octubre de 2009, el día que quedará por siempre en la historia futbolística argentina como el del gol que llegó con tonada cordobesa.
