Este viernes a la tarde, desde las 17 hasta las 19:30, varios grupos de jóvenes activistas a favor de concientizar sobre el cambio climático, se convocaron en la Plaza 25 de Mayo para luego marchar por el centro sanjuanino hasta la Plaza del Bicentenario. La actividad se realizó en más de 30 ciudades de la Argentina y en 160 países del mundo.

Si bien las movilizaciones en contra del calentamiento global no son recientes. La lupa de la sociedad se posicionó sobre Greta Thunberg y su encendido discurso en Nueva York, frente a los líderes del mundo. La adolescente de 16 años, nacida en Estocolmo (Suecia), comenzó su militancia a favor del ambiente desde los 14, cuando se plantó frente al parlamento de su país para exigir que se efectivice el Acuerdo de París, firmado en 2015. Nadie hubiera aventurado que una niña lograría movilizar a millones de personas en todo el mundo.

En la provincia, el movimiento verde también está encabezado por  jóvenes, en su mayoría universitarios, a los que se suman grupos veganos y de izquierda. Un ejemplo es Jóvenes por el Futuro, una incipiente organización que, en muy poco tiempo –comenzaron el 15 de marzo de este año- ya realizaron varias actividades de concientización e inauguraron en San Juan, en esa misma fecha, la marcha que a nivel mundial lidera Fridays for the future, la agrupación ambiental de Thunberg.

En cuanto a las exigencias, los marchantes sanjuaninos coinciden en la necesidad de implementar políticas que disminuyan el impacto ambiental que generan algunas actividades económicas como la ganadería. En ese sentido, uno de los integrantes de Jóvenes por el Futuro señaló que es necesario disminuir el monocultivo y, en especial de la soja, y la indústria cárnica. Además, explicó que, en un mundo con conciencia, lo ideal sería dirigirnos hacia una economía circular, donde los desechos se reutilicen y el producto de la reutilización pueda utilizarse como materia prima.

 El dato de color

Un activista ingenió una curiosa bicicleta que, unida a una licuadora, hace jugos naturales para los marchantes. El mecanismo es sencillo, es el mismo que usan los afiladores, y la idea es furor entre veganos y ambientalistas. Santiago también realiza talleres sobre mecánica de las bicicletas, así como también de reciclaje y compostaje.