Enormes pilas de cartón colocadas en las veredas y en los bulevares. Bolsas con residuos de embalaje al costado de los contenedores. Y cada vez más cirujas y cartoneros que se introducen en estos aparatos para sacar la basura. Este es el panorama que llevó a la Municipalidad de la Capital a salir a multar a los comerciantes que tiren cartones o residuos de embalajes en la vía pública. Algo que está prohibido, según el Código de Faltas. Es por eso que incrementarán la cantidad de inspectores y ampliarán el horario de controles. Este operativo se sumará al control que vienen haciendo desde principios de mes, hacia los cartoneros para evitar que sigan rompiendo los contenedores.
‘El problema no es nuevo pero se está agudizando. Cada vez hay más cartones en las veredas del centro y por ende esto hace que aumente la cantidad de cirujas que rondan la zona’, dijo Jorge Cerdera, secretario de Ambiente y Servicios Públicos de la Municipalidad de la Capital. Según el Código de Faltas, el comerciante que comete esta infracción, puede ser multado con dinero (suma que establece el juez de Faltas), pero si es reincidente la sanción puede llegar hasta la clausura del local. En cuanto al modo de determinar a qué comerciante pertenecen los residuos que están en la calle, Cerdera dijo que ‘los inspectores tienen mucha experiencia y saben cuáles son los negocios que sacan los cartones a la calle y a qué hora’. Del mismo modo que vienen trabajando para evitar que los cartoneros no se introduzcan ni abran los contenedores, los inspectores realizarán estos recorridos acompañados de la Policía.
El funcionario aclaró que no saben qué cantidad de esta clase de residuos sacan a la calle por día los comerciantes, pero dijo que va en aumento. Según Cerdera, lo que deben hacer estas personas es conservar los cartones y materiales de embalaje (cintas, bolsas y telgopor) dentro del negocio y avisar a la Municipalidad para que ésta vaya a retirarlos. Estos descartes no se pueden colocar en los contenedores porque está prohibido.
‘Con la proliferación de esta clase de basura en la calle, aumentan los cirujas porque ellos viven de la venta de los cartones. Esto trae como consecuencia directa que cada vez hay más contenedores rotos. En lo que va de la semana ya quemaron dos aparatos (ver aparte). Esta gente hace de todo para sacar la basura de ellos. Incluso llegan a introducir niños y colocan ganchos para extraer residuos que luego venden’, aseguró Cerdera. La Municipalidad de la Capital activó un operativo de control contra estas personas a principios de mes, luego de que aparecieran varios contenedores rotos.

