Además de tener una sede itinerante, las celebraciones de Carnaval en San Martín volvieron a destacarse por la expectativa que despierta en su gente.

La nueva celebración tuvo al distrito Dos Acequias como sede (van rotando San Isidro, La Puntilla y la villa cabecera del departamento), siempre en dos jornadas. Al cierre de esta edición se realizaba la segunda, con la presentación del Rey Pelusa como show de cierre.

Antenoche, el cordón humano en ambos costados de la calle Nacional, entre Rodríguez y Quiroga, demostraba la expectativa por un carrusel que comenzó cerca de la medianoche. No importaba que la temperatura obligara a más de uno a vestir de manga larga, ni que los locutores de la ceremonia prácticamente rogasen que no se mojara con agua o espuma a los artistas, "para cuidar los trajes".

Era noche de carnaval y, especialmente los niños, los "ataques" con espuma eran una constante. Hasta el intendente departamental, Cristian Andino, tomó la precaución de guardar en una bolsa su celular, sabiendo del riesgo en una celebración que ya acumula 16 temporadas.

La murga infantil "Alicia en el País de las Maravillas" fue la que encabezó el desfile frente a un público compuesto principalmente por familias. Estaban los que se llevaron reposera y conservadora, los que se ubicaron en las tribunas montadas cerca al palco oficial y quienes eligieron una mesa en el sector de los carritos de comida.

Los últimos en aparecer eran los máscaras sueltas "El regreso de las gaviotas sexis", un grupo de amigos del barrio Pie de Palo. Uno de sus integrantes, Martín Bolado, sintetizó la experiencia: "Es poder reír con la gente y también chayar un rato".

 

Una tradición para desinhibirse que ya está afianzada


El entusiasmo de los artistas desfilando en el carrusel era apreciable a simple vista.

Disfrutaban la experiencia, aunque los chorros de agua o espuma aparecieran en cualquier momento.

Especialmente los niños. Ya sea con instrumentos musicales, bailando o desfilando en representación de las instituciones intermedias (como clubes de fútbol y uniones vecinales).

Y el otro ejemplo fueron las máscaras sueltas, como la familia Mazola, de La Puntilla, en que participaron la pareja y 5 niños: la más pequeña, en brazos de la madre. "En Dos Acequias se acerca mucho la familia", afirmó Santiago López, de otra agrupación.

Reinas por elección y por sorteo

Al cierre de esta edición se realizaba la elección de la reina Mayor, entre 10 candidatas. El carnaval también cuenta con una Reina Menor y la que resulte seleccionada fue porque quiso la suerte. Es que se hace un sorteo para esa elección.

Siga el baile

No hay advertencia o súplica que detenga a los niños y sus frascos de espuma a disparar a quien pase por el eventual corsódromo. Y los artistas, sin perder la sonrisa, apuestan a que, de todos modos, el show debe continuar.

Para disfrazarse, todo vale

Las máscaras sueltas también estuvieron contempladas en las celebraciones y hoy se conocerá a sus ganadores, al igual que en el rubro murga, carruaje y comparsa. Entre los carruajes, las referencias tradicionalistas son las principales.