Mientras se intensifican las conversaciones en la oposición con vistas a las elecciones legislativas, el sector que encabeza el moyanista Enrique Castro y el basualdismo dieron muestras de estar dispuestos a compartir un frente. El titular del gremio de los camioneros planea iniciar en estos días una ronda de conversaciones con fuerzas antikirchneristas y aunque no quiso tirar prenda de posibles socios, en su entorno aseguraron que hay algunos factores que naturalmente lo ponen más cerca del partido que encabeza el senador Roberto Basualdo: los dos son de raíz justicialistas, fueron aliados en 2007 y a nivel nacional, el líder de la CGT ató un acuerdo con referentes del peronismo disidente. La presidenta del basuadismo aseguró que hay muchas coincidencias.
En la provincia, Castro está armando el partido de Hugo Moyano y ayer aseguró que empezará a dialogar con dirigentes de la oposición. La señal la recibió el martes, luego de que el líder de la CGT disidente a nivel nacional sellara sociedad con los peronistas no kirchneristas José Manuel De la Sota, Francisco De Narváez y Roberto Lavagna.
El titular de STOTAC no quiso cerrar puertas y aseguró que hablará “con todos”, incluyendo la Cruzada Renovadora y la UCR, que están negociando para armar un frente. Sin embargo, uno de sus colaboradores advirtió que hay muchas más chances con el basualdismo, que ya acordó jugar con el ibarrismo y el PRO y espera la respuesta del bloquismo disidente y el partido Actuar.
Castro fue electo diputado en 2007 en el frente que encabezó el basualdismo. Aunque en 2009, quedaron en veredas contrarias y el camionero se abrió. Pasa que el senador se declaró en desacuerdo con las políticas de Cristina y Moyano aún mantenía buenas migas con el kirchnerismo.
La presidenta del basualdismo, Susana Laciar, señaló que “mantenemos una relación excelente con Enrique”. “Hay muchas coincidencias y ya veníamos hablando con él”, agregó.