Se calcula que entre el 5 y el 15 por ciento de los niños en edad escolar están infectados, por lo que es fácil que se contagien unos a otros. Se ha comprobado que a las niñas las atacan con más facilidad.
Los piojos, si no encuentran un huésped de quien alimentarse no viven más de 48 horas.
Los gustos de los piojos están muy definidos. Prefieren a los niños entre 3 y 14 años y a las mujeres más que a los hombres. Un varón de más de 25 años rara vez es víctima de estos molestos invasores, ya que tienen un tipo de secreción sebácea que no es de su agrado.
Un piojo adulto mide hasta 2, 5 milímetros, ponen huevos llamados liendres que adhieren al cabello a menos de un centímetro del cuero cabelludo mediante una especie de pegamento que hace muy difícil su extracción. Las liendres van cambiando su color de acuerdo a su estadio. Al principio tienen un color más obscuro y cuando están vacías quedan blancas.
Un piojo pone de 5 a 8 huevos por día y más de 200 huevos en toda su vida.
Cada piojo vive alrededor de un mes.
Tienen 6 patas que terminan en pequeñas garras, lo que le facilita su desplazamiento por el pelo y cuero cabelludo, tienen tórax, abdomen y una pequeña cabeza con un pico mediante el cual succionan sangre.
