Haciendo ruido con lo que tenían a mano, el grupo se instaló por un buen rato en la Plaza 25 de Mayo. Llevaban carteles y pancartas para expresar su descontento por la decisión de la ATAP, entidad que nuclea a los empresarios del transporte de pasajeros, de exigir la presencia de un acompañante a todos los usuarios del pase de discapacitados. La medida que, desde hace aproximadamente 15 días, hizo que todos los titulares de este beneficio tengan que pagar boleto si no viajan con su acompañante quedó suspendida por la intervención del propio gobernador José Luis Gioja, quien dialogó con los empresarios de ATAP, para acordar un impasse hasta el 8 de abril. Durante ese lapso, los discapacitados podrán seguir viajando gratis sin acompañante, mientras se busca una solución definitiva al conflicto.

"Soy discapacitado, no soy peste", decía uno de los carteles hechos a mano con que los discapacitados marcharon luego desde la Plaza 25 de Mayo hasta la sede de la Dirección del Discapacitado, en calle Mendoza y Santa Fe. Allí volvieron a reiterarse las protestas en fuerte tono: todas tenían en común la queja sobre la forma en que esa entidad emite los certificados por discapacidad. "Yo soy discapacitada porque tengo una cardiopatía y voy todos los días a rehabilitación. Tengo que pagar el boleto todas las veces, porque mi pase dice que tengo que ir con el acompañante, que es mi hijo, pero él trabaja y no puede andar conmigo de arriba para abajo", se quejó Clara, mientras mostraba su pase emitido por Emicar hace apenas un mes atrás, en el que figura el nombre de su hijo como acompañante para viajar gratis en colectivo. Valeria, una jovencita que asiste a un taller de capacitación laboral, explicó que "antes viajaba con mi mamá, pero desde este año me enseñaron a viajar sola, porque mi mamá se tiene que quedar cuidando a mis hermanos y si tengo que pagar el colectivo, no voy a poder ir más al taller".

Mientras, desde la Dirección de Tránsito y Transporte revelaron que las conversaciones con el sector empresario no se han interrumpido, a fin de lograr llegar a un acuerdo definitivo respecto al conflicto. Dado que los carnets que emite la empresa Emicar se confeccionan en base a la evaluación y certificación realizada por la Dirección del Discapacitado, hay una alta probabilidad de que un gran números de casos tengan que ser reevaluados y reclasificados, trámite que la titular de esa Dirección consideró como "muy complicado". "Estamos dando turnos para muchos meses adelante, para las evaluaciones. Y no es justo que el que pidió el turno hace 5 meses, ahora se quede atrás porque hay que reevaluar a muchas personas. Tendremos que encontrar una solución alternativa, hasta que podamos solucionar el tema en forma definitiva", expresó el lunes Sandra Lirio. La intervención de Gioja frenó momentáneamente la situación que venían atravesando los discapacitados y acercó a las partes. "Hay que darle la razón a la gente", manifestó el gobernador a DIARIO DE CUYO, fijando su posición sobre el conflicto del transporte. Por un lado, ATAP, que reclama que la ley se cumpla para evitar problemas por posibles accidentes que podrían sufrir los discapacitados y por otro, los propios interesados, muchos de los cuales ya hicieron la denuncia ante el INADI por discriminación.