No fue el impacto de un meteorito, ni un ataque terrorista de Al Qaeda. Fueron los obreros municipales que prácticamente dieron vuelta la plaza de Rodeo. Aunque a simple vista da la sensación de que allí cayó una bomba por la cantidad de escombros que hay, lo que sucede es que la están remodelando. Pero el fin de obra está previsto como una de las actividades del Bicentenario, para mayo próximo. Una imagen poco atractiva para los que llegan a uno de los destinos turísticos más buscados de la provincia en Semana Santa. El contrapunto se encuentra a pocos kilómetros, en el dique Cuesta del Viento, donde a pesar de la poca agua, los deportes acuáticos están haciendo furor en este fin de semana largo.

Desde el año pasado, en Rodeo están realizando obras públicas con fondos de las regalías mineras. Comenzaron con el ensanchamiento de la calle Santo Domingo y la construcción de veredas, pero todavía no concluyen la tarea. A esto se sumó que hace unas semanas empezaron a remodelar la plaza que está frente a la Municipalidad de Iglesia. Según las autoridades municipales, todo esto será inaugurado en mayo, cuando se celebre el Bicentenario de la Patria. Pero para los turistas que comenzaron a llegar el miércoles pasado, el panorama no deja de ser incómodo.

"Sabía que este era un lugar hermoso, pero llegamos y nos encontramos con escombros por todas partes. Deberían haber planificado mejor los tiempos", dijo Noemí Araya, de Buenos Aires. Por su lado, Gustavo Poblete, un artesano de Córdoba, aseguró que todos los años va a vender artesanías a Rodeo y se colocaba en la plaza. "Ahora no sé dónde me van a mandar. La plaza es el paso obligado de todos", dijo el artesano.

Más allá del desagradable paisaje urbano de Rodeo, el lugar está colmado totalmente. El jueves ya había un 100 por ciento de ocupación y 25 familias de esa localidad ya tenían alquiladas habitaciones de sus casas. Desde la oficina de Turismo del departamento dijeron que estaban buscando más casas de particulares para alojar a los turistas. En Semana Santa del 2009, las viviendas llegaron a 35, pero, según fuentes oficiales, este año iban a superar esa cifra porque la demanda era mucho mayor. Esto es a pesar de que ya están alquilando las cabañas municipales, que habían sido refaccionadas en el 2009 con plata de la minería, pero no las abrieron cuando empezaron las vacaciones de verano. En un primer momento se dijo que era porque iban a tercerizar su manejo en manos privadas, tal como sucedió con el complejo municipal de Barreal. Sin embargo, las cabañas siguen siendo administradas por la Municipalidad.

Un encuentro de kitesurf y talleres de windsurf en algunos de los paradores del dique Cuesta del Viento hicieron que para este fin de semana hubiera un turismo con perfil bien definido. La mayoría llegó a Iglesia con la tabla en el techo del auto. Según los encargados de los cuatro paradores que hay en la playa, esta es una de las mejores temporadas de los últimos 5 años, por la cantidad de gente que está yendo y porque se están quedando más días.