Ayer en la mañana se produjo uno de los encuentros que generó mucha expectativa esta última semana a raíz de los hechos que pusieron en el tapete una supuesta rivalidad entre San Juan y Mendoza por sus fiestas: el de Macarena Guerrero, Reina Nacional del Sol, y María Flor Destéfanis, Reina Nacional de la Vendimia. Durante el mismo, ambas se encargaron de dejar en claro que este supuesto enfrentamiento no las afecta ni las tiene como protagonistas. Por el contrario, se comprometieron a trabajar juntas para que los dos eventos sigan creciendo a nivel internacional.
"¿Vos sos la Reina del Sol? ¿Cuántos años tenés?". Estas fueron las preguntas que le hizo María Flor Destéfanis a Macarena I antes de saludarla con un fuerte abrazo y un beso interminable. Saludo al que la Reina del Sol respondió con igual afectividad. Fue durante la conferencia de prensa sobre la Fiesta Nacional de la Uva y el Vino de Caucete a la que ambas fueron invitadas. Ante las preguntas de la prensa sobre su opinión con respecto a la polémica generada por la rivalidad entre estas dos fiestas, María Flor dijo que "lo que sucede es que estos eventos se han politizado y han perdido su sentido real que es el de mostrar la grandeza de cada pueblo". "Cada fiesta tiene lo suyo e involucra el trabajo duro de mucha gente -sostuvo la mendocina-. Y ni a San Juan ni a Mendoza le hace bien que se le dé trascendencia a hechos que sólo las opacan".
Lo mismo opinó Macarena I quien agregó, además, que le hubiera encantado ir a la Fiesta Nacional de la Vendimia, pero que no va a faltar la oportunidad de visitar la provincia vecina durante su año de reinado.
Terminada la conferencia, ambas reinas se reunieron con sus pares de otras localidades antes de partir hacia la bodega en donde disfrutarían del almuerzo real, organizado por la Municipalidad de Caucete. Previamente, las chicas comenzaron a comparar el diseño de sus capas, y a conocerse un poco más entre sí. Noelia Ferrara, Reina Nacional del Contratista Rural de Córdoba, contó que su pueblo tiene sólo 10.000 habitantes que viven del cultivo de trigo, maíz y soja. Este comentario sirvió para que cada una de las reinas hablara de su tierra natal, coincidiendo todas, en la poca población. "Somos pueblos chicos, pero de corazón grande", dijo Macarena I ante el aplauso de las demás soberanas.
A las 13.30, ya más compinches entre sí, las reinas compartieron un asado al aire libre. Macarena I y María Flor Destéfanis no tuvieron problema en llenarse de tierra con tal de ratificar la simpatía entre ambas. Con la dificultad de caminar con tacos por entre los cascotes, se metieron entre los viñedos para participar de una sesión de fotos. Juntas.

