Trabajan empujados por el amor que sienten por los caballos. Pero eso no les alcanza para los gastos de alquiler de corrales, alimentos y medicamentos para los animales. Sobre todo, teniendo en cuenta que lo hacen con fondos propios y donaciones; y que en medio de la crisis sanitaria y económica subieron todos los precios. Es por esto que la gente de Rescate Equino dejará de hacer su trabajo de rescate de caballos. Eduardo Agüero, uno de los miembros del grupo, comentó que tienen en este momento 7 caballos, que los seguirán cuidando, pero que no podrán recibir animales nuevos. "En marzo gastábamos unos 2.500 pesos por animal por mes. Ahora, para eso mismo necesitamos cerca de 8.000 pesos. Es una locura y no podemos endeudarnos", dijo indignado y comentó que además de la cuestión económica ellos sienten que nunca tuvieron el respaldo que necesitaron de las autoridades.

"Durante los 4 años que llevamos trabajando hicimos mucho. Recatamos animales que eran muy maltratados, que estaban mal alimentados o que estaban en total abandono. A algunos pudimos darlos en adopción, otros se murieron con el paso del tiempo o fueron devueltos por la Justicia a sus dueños y otros nos quedaron a nosotros", dijo y comentó que hasta ahora ellos trabajan como depositarios judiciales de esos animales, pero que no recibirán más caballos porque les resulta "insostenible" la situación. Según lo que comentó Agüero el 100% del dinero que gastan mensualmente sale de sus bolsillos o de algunas donaciones. Sin embargo, comentó que los padrinos que pagan una cuota de 200 pesos mensuales ya no están colaborando con la misma frecuencia que antes, por la crisis económica que atraviesa el país. "En marzo, cuando empezó todo esto teníamos 80 padrinos y hoy por mes no superan los 5. Entendemos que las personas tienen prioridades y prefieren comprar leche para sus hijos que ayudar a nuestros caballos, por eso se nos hace imposible seguir", dijo y comentó que sumada la cuestión económica ellos pidieron durante los 4 años algunas leyes que hagan que mejore la salud de los caballos que son usados por carreteleros. "No queremos plata de ninguna autoridad de gobierno, porque no queremos atarnos políticamente. Nosotros pedimos que haya leyes que prohíban ese trabajo o que se obligue a la que gente que usa carretelas para trabajar que cuide a los caballos. El problema de los carreteleros no es un problema económico sino social", agregó Agüero y comentó que en muchas ocasiones ellos hicieron campañas para herrar caballos, llevar mercadería a los carreteleros y hasta abrigo para los animales, pero que después de un tiempo los animales volvieron a ser maltratados. "Para nosotros es muy triste tener que decir adiós a esta tarea, pero la verdad que no podemos seguir endeudándonos porque los caballos no paran de llegar a nuestro corral y nosotros alquilamos un lugar. Ya tenemos hasta una deuda con un veterinario porque no podemos pagar", concluyó el cuidador.

  • Algunos casos emblemáticos

Desde hace 4 años ellos hicieron numerosos rescates de animales. Para ellos el más emblemático fue el de "Talcahuano", nombre con el que bautizaron al animal que murió hace unos meses. "A Talcahuano lo rescatamos gracias a un grupo de vecinos que vieron cómo el animal era agredido por su dueño por no poder cargar una carretela llena de escombros. A ese caballo lo salvamos gracias a la gente y se murió de viejito", dijo Agüero.

El hombre comentó que el rescate de una yegua con su potrillo que corrían por el medio de la Circunvalación, y el de 9 caballos en Zonda que estaban extremadamente desnutridos y que hasta a algunos les faltaban sus ojos, fueron los que más trascendencia tomaron y a ellos les dieron fuerza para seguir con esta tarea, que ahora van a abandonar.