La comunidad educativa toda junto a exalumnos manifestaron esta semana su preocupación por la versión de instalación de un club en la Escuela de Enología.

Por el  Enólogo Juan Carlos Albizú

El enólogo Juan Carlos Albizú elaboró esta semana un importante informe para Suplemento Verde de DIARIO DE CUYO de lo que la Escuela de Fruticultura y Enología, de la cual fue su director, constituye en San Juan:
"Es una escuela emblemática, creada por Domingo Faustino Sarmiento como la Quinta Normal de San Juan en 1862, que con el transcurrir de los tiempos cambió su oferta educativa, durante 54 años otorgó el título de Fruticultor Enólogo, a partir de su creación el 15 de enero de 1940, más de 1.000 graduados aportó a la vitivinicultura de argentina y sudamérica al albergar estudiantes de Brasil, Bolivia, Perú, Uruguay, Chile y Paraguay, hasta la creación de la carrera en su país. 


Funciona desde 1885 en Desamparados, gracias al doctor Segundino J. Navarro con el beneplácito de su creador, quien en su última visita a su terruño expresó su desagrado por el abandono en que se encontraba en su emplazamiento original -Escuela Normal-, 'el fundo de los Ortegas, tres manzanas y medias, dentro de las calles anchas', adquirido durante su gobernación, siendo una de las obras más apreciada pero a su vez más resistida y desvalorada por los funcionarios de la mayoría de los sucesivos gobiernos, rescatamos la labor y esfuerzos realizados por el doctor Navarro que con el apoyo del gobernador Dr. Carlos Doncel, concluyó felizmente con su reinstalación definitiva en el histórico solar que hoy es motivo de angustia para la mayoría de los sanjuaninos que sentimos un gran aprecio y valoramos al establecimiento educativo por lo que representa para nuestra vida, la ciudad y la provincia toda. 


Tanto la Escuela de Enología como el Instituto Superior de Enología, tienen una misma raíz. Aspiramos que algún día vuelvan a compartir las instalaciones, que alumnos y docentes de ambos niveles desarrollen sus actividades en la casa común, volviendo a poblar sus paseos, parques, aulas, talleres, plantas industriales, laboratorios y campos productivos con su presencia y sus autoridades a gestionar la Institución educativa con sus realidades diferentes. Un gran motivo para pedir a las Autoridades educacionales y del Gobierno provincial que abandone de una vez para siempre las amenazas de que van a ser trasladados a Departamentos alejados, ya que el funcionamiento de un establecimiento educativo no es incompatible con los centros urbanos, lo que realmente sí es incompatible la falta de presupuestos y falta de personal auxiliar para cubrir las labores que no realizan los alumnos y no podemos disimular el desagrado que nos causan los sucesivos despojos de los terrenos que históricamente pertenecen, que viene sufriendo su desmembramiento podríamos decir natural por el crecimiento y la urbanización necesaria de la zona, a lo que se agrega ahora con la entrega a otras instituciones ajenas a la actividad educativa, hechos muy comunes desde hace algunos años aduciendo que son terrenos del gobierno provincial, los terrenos han pertenecido y pertenecen a la Escuela de Fruticultura y Enología, hoy en la órbita provincial".