Los amantes de la naturaleza y de las aventuras, inclusive los viajeros curiosos, tienen un lugar por descubrir en la vecina provincia de La Rioja. Dicen que más que un simple lugar es una maravilla. La Laguna Brava, un espejo de agua ubicado a unos 4200 metros sobre el nivel del mar, en plena Cordillera de los Andes y, como si fuera poco, es un sitio Ramsar (Humedal de Importancia Internacional para la Conservación de la Diversidad Biológica) de más de 400.000 hectáreas. ¿Qué más se le puede pedir a esta inmensidad? Qué sea un paisaje de ensueño, hábitat de flamencos, vicuñas, llamas y guanacos, zorros, pumas y todo tipo de aves migratorias, dónde reinan los colores y los aromas e inclusive la historia con Sarmiento como protagonista. Todo eso y mucho más es Laguna Brava, orgullo de los riojanos.


Lo mejor de todo es que queda relativamente de San Juan, en el departamento de Vinchina, a 200 kilómetros de Villa Unión, cabecera del departamento General Felipe Varela. Y que justamente en esta etapa del año que empieza, la temporada alta de primavera-verano, la actividad se acrecienta porque es el momento ideal para visitarlo, dada las complejidades climáticas que se viven en la Cordillera de los Andes en otros períodos del año. 

Eso sí, por tratarse de una reserva hay que respetar algunas premisas y reglas para ingresar, como por ejemplo ir acompañado de un guía habilitado. Es que en el recorrido se puede disfrutar no solo de montañas que superan los 4 mil y 5 mil metros sino también volcanes que superan los 6 mil metros, otorgándole aún mayor belleza paisajística.


Entre los puntos más destacados que hay camino a la reserva, no hay que perderse el Valle del Río Bermejo -conforma uno de los valles más ricos e importantes, ideal para la observación y la fotografía-, el cerro El Toro y el Condado en Villa Castelli, la Quebrada de la Troya en Vinchina (una cuesta de 7 kilómetros con enormes montañas de piedra arcillosa a los costados, con aguadas y huellas fosilizadas de animales), el Alto Jagué, lecho de un río de deshielo. Luego el sendero continúa por varias quebradas como la de Santo Domingo y la De la Vaca que llevan a un refugio de montaña construido por Sarmiento para albergar a los arrieros que conducían el ganado a Chile, según cuentan los lugareños. 


Una vez en la reserva, hay diferentes recorridos y circuitos a elegir, por supuesto dependiendo del tiempo disponible y el grado de dificultad que pueda sobrellevar cada persona. 


Claro que lo más esperado es llegar a Laguna Brava -un espejo de aguas saladas que recibe ese nombre por el ruido que hace el viento-, desde donde se puede divisar desde los restos de un avión caído en la década del "50 hasta un cúmulo de penitentes o formaciones de hielo y los picos montañosos conocidos como El Veladero, Bonete Chico y Pissis, el segundo más alto de América, con 6.880 metros sobre el nivel del mar.


 

Cómo llegar


Hay 480 kilómetros de distancia entre San Juan y Laguna Brava. Uno de los caminos que se puede tomar es el que va por Jáchal, pasa por Huaco hacia Guandacol. Luego se desvía a Villa Unión hasta San José de Vinchina por la ruta provincial 26. De ahí a Jagüe hasta Laguna Brava. Son un poco más de 7 horas de viaje. Pero el paisaje es altamente recomendable.


Otra posibilidad, es por la ruta 40 y la ruta 150 que lleva al Parque Provincial Ischigualasto y desde este punto llegar a Villa Unión para continuar el recorrido ya descripto.


Para mayor información: www.turismovillaunion.gob.ar y www.turismolarioja.gov.ar. La Secretaría de Turismo La Rioja se encuentra en Avenida Ortiz de Ocampo y Avenida Félix de la Colina. El teléfono es 0380-4426345.


 

El dato


Además de recorrer la reserva de Laguna Brava en detalle, resulta muy interesante visitar algunas localidades y sitios previo a llegar y luego de dicha visita. Lugares como Aicuña, Los Palacios, Pagancillo, Guandacol y Santa Clara, entre otros tantos puntos de Valle del Bermejo, también Cañón del Triásico, Vallecito Encantado, el Cañón de Anchumbil y por supuesto, el majestuoso Parque Nacional Talampaya completarán sin lugar a dudas un itinerario precioso por demás.


Entre otras alternativas, desde Laguna Brava se puede conocer Vinchina, Villa Castelli, Villa Unión, Chilecito y la capital riojana.

Preparados para la aventura


Según recomiendan distintos viajeros que ya han tenido la experiencia de pasear por Laguna Brava, hay algunas cuestiones a tener en cuenta para que el recorrido resulte sin inconvenientes.

.Hay estrictos horarios para el ingreso por cuestiones de seguridad. Durante todo el año, se puede llegar a la reserva entre las 9 y las 14. Salvo que se hayan pautado salidas especiales por determinados circuitos en dónde el ingreso puede hacerse de madrugada.

.Hay que pagar una entrada para tener acceso a la Reserva Provincial Laguna Brava.

.Se aconseja ir con un guía autorizado. Es más para poder adentrarse en la cordillera lo exigen. Generalmente estos profesionales no sólo conocen los secretos del camino sino además recomiendan las mejores alturas para ir haciendo paradas en el trayecto para poder fotografiar el paisaje, las montañas de diferentes colores, los animales que van apareciendo de sorpresa en el camino y las geoformas que se encuentran en todo el recorrido.

.Por tratarse de un espacio donde reina la naturaleza, no hay mayores construcciones ni comodidades para el turista como sanitarios ni un parador o kiosco para comprar comida y bebida. Por lo tanto es fundamental llevar abastecimiento, al menos de agua y de algo para comer.

.En el área de Reserva no hay sitios para alojarse, ni acampar. Sólo existe la posibilidad de pernoctar en algunos refugios cordilleranos o en la zona de Barrancas Blancas, sólo en caso de emergencia.

.Inclusive hay que tener en cuenta que hay que llevar suficiente combustible en el tanque del auto y chequear que los neumáticos estén bien inflados y la rueda de auxilio en condiciones, en el caso de hacer el recorrido en el propio auto porque no hay modo de resolver estas cuestiones. Las estaciones de servicios más cercanas están en Villa Unión, Villa Castelli y Vinchina. Muchas de ellas sólo cuentan con nafta súper y gasoil, pero no proveen gas.

.El lugar se caracteriza porque hay mucho viento, siempre. Por lo que hay que ser precavido y llevar ropa de abrigo (especialmente rompevientos) no sólo para poder soportar el frío de la cordillera sino por el viento.

.También recomiendan llevar en un bolsito de mano protector solar y visera o gorra. Es fundamental tener el calzado adecuado para la montaña.

.Además como se accede a una altura más que considerable y por ende, disminuye el oxígeno, hay que moverse con cuidado y evitar no agitarse. En altura hay que caminar despacio.

.No todo el recorrido dentro de la reserva está asfaltado, por lo que se debe tener y prestar mucha atención de no salirse de los caminos oficialmente establecidos. Por esta razón se recomienda ir con un guía del sitio. Siempre hay que circular con precaución, debido a la presencia de animales sueltos

.Hay que disponer de al menos un día completo para aprovechar el paseo. Inclusive una sugerencia que no es menor es la posibilidad de tener reserva en un hotel en el departamento más cercano a la zona, que es General Felipe Varela, para no tener que hacer un largo recorrido hasta llegar al alojamiento, luego de una jornada de viaje y caminata que seguramente resultará agotadora.