Foto: colaboración Gastón Dorgan y archivo Club Sirio Libanés de San Juan


Los festejos por el centenario del Club Sirio Libanés no se limitan a los homenajes para los primeros inmigrantes que dejaron sus tierras en Medio Oriente y encontraron un nuevo hogar en San Juan. Ni tampoco están restringidas para los descendientes comprometidos con mantener vivos sus recuerdos o los hacedores del magnífico edificio patrimonial que sigue albergándolos. Las celebraciones incluyen también a las nuevas generaciones de familias que a diario sostienen y dan un nuevo sentido a sus raíces.


Es por eso, que para seguir festejando, han organizado para el próximo fin de semana, un evento por demás original y convocante: una noche árabe de juegos, sabores, bailes y objetos -algunos de los elementos culturales fundamentales- para compartir en familia. Será, al decir de sus organizadores, una especie de viaje mágico y sensorial por las costumbres y tradiciones de sus abuelos para revivirlas entre grandes y chicos. Será el sábado 27 de julio, en la sede de calle Entre Ríos.

"Queremos que todos los paisanos, pero también las familias jóvenes con hijos chiquitos o adolescentes, inclusive sus amigos y conocidos que no son descendientes sirios ni libaneses encuentren su lugar en nuestra casa. La convocatoria no es venir a ver a una fiesta ni a una cena show ni muchos menos, es venir a participar, a divertirse, a bailar, a disfrutar con todos los sentidos'', propone Mauricio Caif, organizador de la propuesta como integrante del grupo Cedro, un espacio de encuentro de quienes fueron parte de la juventud de la colectividad y hoy buscan hacerse un lugar que les permita transmitir los valores árabes a sus hijos. De hecho, en este grupo del Club Sirio Libanés se aúnan las familias jóvenes con papás y mamás de entre 25 y 45 años con chicos hasta 15 años, entre los que se encuentran también Sebastian Mattar, Libana Guzmán Mattar, Valeria Panella Barud, Gastón Dorgan.


¿Qué va a tener esa noche para recibir a los interesados? De todo. Según adelantó Marcela Zegaib, otra de las organizadoras, habrá desde un rincón para ataviar y pintar a los más chiquitos como verdaderos árabes y un salón especialmente decorado con alfombras y almohadones donde se proyectará la película infantil Aladín hasta un espacio ambientado con objetos traídos de sus países de origen y cedidos por las familias más tradicionales -entre los que habrá atuendos, narguiles, lámparas, alfombras- para que todos los participantes se lleven su foto de recuerdo en un paisaje que remita a Medio Oriente.


La plato fuerte van a ser los juegos: en una especie de kermese que llevará adelante el grupo Recrearte con propuestas un tanto innovadoras y otras de juegos más tradicionales, para que compartan y compitan padres e hijos, con premios y sorpresas como aliciente.


Claro que nadie podrá aburrirse porque además de un show de magia a cargo del mago David, los integrantes del ballet Al Sham -del club- bailarán frente a los presentes y, como broche de oro del evento, enseñarán a los chicos y sus padres los pasos de un típico Dabke Libanés para que nadie se quede sentado en su silla. Por supuesto, habrá tiempo para probar los sabores típicos.

"Queremos compartir con todos una verdadera experiencia árabe, que recordemos de dónde venimos y quienes somos'', resume la iniciativa Marcela. 

Buena mesa

 

La noche del sábado, y como no podía ser de otra manera tratándose de una actividad de la comunidad, tendrán gran protagonismo los sabores típicos de las cocinas turcas, libanesa y siria. Será la oportunidad para salirse de la dieta y darse un gustito con meshe (que no son ni más ni menos que los famosos niños envueltos), kebbe o kepi (considerado el plato nacional de Siria y Líbano, son albóndigas a base de carne picada de cordero con trigo burgol y especias), labneh o queso árabe (elaborado a partir del filtrado del yogur natural) y hummus (o puré de garbanzos) con tostaditas. También se servirán empanadas (sfijas) y pizzas árabes, entre otras variedades de pizzas. Han previsto un menú celíaco.

Para los más golosos, habrá baklava (es un pastel de masa filo relleno con una pasta de pistaschos, almendras o nueces trituradas, bañados en almíbar y miel) y sambusek (empanaditas o pastelitos de nueces).

Para beber habrá limonada árabe, arak (tal como se llama al anisado libanés) y el tradicional café a la turca.

Además habrán narguiles -pipas de agua para fumar tabaco, que pueden endulzarse o saborizarse- para dar algunas pitadas.

PARA AGENDAR

Para participar de esta invitación a vivir una verdadera experiencia árabe, solo hay que acercarse a adquirir las entradas por la portería de la sede social ubicada en la calle Entre Ríos 33 sur, en horario de 9 a 13 horas.

Las entradas tienen dos valores: $150 pesos para quien vaya de manera individual y $250 para la familia completa, sin importar la cantidad ni la edad de los integrantes. Además en los salones del Club habrá stand gastronómicos donde poder adquirir a gusto platos típicos y no tanto (ver Buena Mesa), a precios accesibles, según detallaron desde la organización.

Hay que apurarse para adquirir los pases, ya que hay cupos limitados para 250 adultos y 120 niños.

La actividad en cuestión tendrá lugar el próximo sábado 27 de julio, a partir de las 20:30 horas.


> OTRAS INICIATIVAS

Hay un calendario por demás interesante, variado y participativo que se extiende a lo largo del año, armado entre la Comisión Directiva del Club Sirio Libanés que preside Miled Marún, con la participación de socios voluntarios como Marcela Zegaib y Mauricio Caif, más los aportes de Betty Puga, entre otros, para celebrar el centenario de la institución.


Visitas guiadas por la emblemática sede, degustaciones de platos típicos, charlas, homenajes, cenas, talleres de historia y arquitectura, clases de árabe, campeonatos de juegos de mesa, clases de gastronomía y de folclore libanés y sirio, son algunas de esas actividades. El cierre del año vendrá con la presentación del libro de los 100 años y una obra de teatro alusiva.