“Estamos intentando tener una reunión con la gente de Pascua Lama para comenzar a diagramar. Que nos digan las contrataciones que van a necesitar, empezar a trabajar en las empresas para poder abastecer este proyecto que va a demandar muchísimo más de lo que demandó en su momento Veladero”.

Así definió las expectativas locales en torno al mega-proyecto binacional el gerente de la Cámara Argentina de Servicios Mineros (Casemi), Alejandro Donna, en diálogo con CUYO MINERO.

El pasado 7 de mayo Barrick hizo el anuncio mundial del inicio de la construcción de la mina de oro más grande de Sudamérica, ubicada a caballo de la cordillera de los Andes entre la Tercera Región de Chile y el departamento de Iglesia, en la provincia de San Juan. Entonces se deslizó extraoficialmente que sería septiembre el mes de inicio de los trabajos, una vez superadas las inclemencias climáticas propias del invierno en la alta montaña.

Cuando ha pasado la primera quincena de mayo, la expectativa empresaria del cluster local va in crescendo.

Extraoficialmente trascendió que en la cena de la minería, realizada el 7 de mayo en Rivadavia, hubo una invitación de Barrick al empresariado local para hablar sobre Pascua Lama, que luego se postergó sin fecha. Por lo pronto, también trascendió que la “ingeniería del proyecto” se está definiendo en Chile.

“Nosotros podemos llegar a sacar deducciones por lo que ocurrió con Veladero, pero no sabemos nada acerca de la demanda real que presentará Pascua Lama”, consideró Donna.

“Nos preocupa porque no tenemos mucho tiempo. El trabajo de la Casemi es convencer a los empresarios locales de que se unan para poder competir en igualdad de condiciones con las empresas que vengan a cotizar desde afuera”, agregó el gerente de la cámara.

Hay dos frentes de ataque en estos preparativos. Uno de ellos es la búsqueda de créditos blandos, vía gobierno, para adquirir mayor equipamiento. El otro es la contratación de mano de obra, debido a que vienen de muchos meses de inactividad.

Sin embargo, antes de avanzar en ambos aspectos, los empresarios reclaman alguna coordenada desde Barrick para poder hacer las previsiones en cuanto a los volúmenes que van a manejar.

En cualquier caso, está incluida en la Declaración de Impacto Ambiental la condición impuesta por el gobierno provincial de privilegiar la contratación de mano de obra y empresas prestadores locales, a igual precio y calidad que una firma exógena.

“Pero si no nos dicen lo que se viene, estamos desorientados. En septiembre/octubre comenzaría la obra. Yo creo que las contrataciones más importantes comenzarán a fin de año. Es decir, faltan unos 8 meses. Pero en tiempo de unir empresas, es poco”, concluyó Donna.