Los espacios verdes, ya sean deportivos, culturales, turísticos, cumplen en todo momento una función ecológica y ambiental indiscutible. Los árboles cumplen varias funciones primordiales: purifican el aire, reducen la contaminación, regulan la temperatura, la polución sonora, brindan sombra y, además, son el soporte de vida de distintas especies de nuestra fauna.

Existen estudios que reflejan como la calidad del aire aumenta en calles arboladas donde la distancia entre ejemplares es menor entre sí, o donde las copas de los mismos llegan a tocarse en altura formando un verdadero túnel.

La función principal de los árboles de alineación o arbolado público, no es definitivamente la ornamental, sino la de aumentar la calidad ambiental. Por ello la realidad en nuestra provincia frente a la arboleda merece detenernos y analizar la situación. El director de arbolado público perteneciente a la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable de la provincia explica las competencias, programas y desarrollos que se llevarán a cabo frente al 2017.

El árbol, como un servicio a la comunidad

"Lo primero que tenemos que plantearnos, aclara Bustamante, son los sujetos que intervienen en el cuidado del arbolado público, dejar en claro quienes son los que participan y en qué participan. Hay una confusión en la gente de cómo se complementan la provincia y el municipio, y además hay otras instituciones que también participan en el cuidado del mismo.

El arbolado público debe ser pensado como un servicio público, lo mismo que alumbrado, barrido, limpieza, etc. La arboleda de la calle cumple un sin fin de beneficios al hombre de urbe, algunos de ellos son: ahorro de energía, disminución de temperatura en la isla de calor urbana, mejorías para el asfalto porque una calle bien forestada dura más que una que no tiene arboleda y está al rayo del sol. Entonces es imprescindible que la forestación no solo lineal, de espacios verdes, plazas, parques y jardines. Ahora bien, como se trata de un servicio, el mismo está en manos del municipio.

¿Por qué tiene tanta intervención la provincia en el tema?

Una razón es que los municipios todavía no han visualizado y otros no pueden abarcar esta área como parte de las labores que tienen a su cargo. De alguna manera esto nos pasa a todos ya que el árbol nos ha impedido ver el bosque.

Cuando se habla de urbanización se piensa generalmente en calles, cunetas, edificios, señalización, y se pierde de vista que el arbolado también es parte de la estructura urbana cumpliendo las funciones más importante para los individuos que viven en la urbe. En primer lugar determinamos que es el municipio quien tiene a cargo el manejo del arbolado público. Es quien posee la estructura de herramientas, personal, maquinarias, etc., para realizar el mantenimiento. Y, es él mismo quien se encarga de hacer convivir la forestación con los otros servicios, el paso vehicular, el peatonal, el alumbrado publico, el cableado, entre otros. 

Muchas veces nos preguntamos, ¿cuál es el árbol ideal para la vereda o calle?

En realidad la naturaleza no ha diseñado un árbol para la calle o entorno urbano. Es el hombre quien lo adapta al entorno. Se trata de elegirlo de acuerdo al lugar y a las condiciones de clima y suelo, el más conveniente.

La realidad es que ningún árbol es cien por cien apropiado. Entonces, aquí surgen las labores sobre el manejo del arbolado público y advertimos que son pocos los municipios que cuentan con áreas técnicas asociadas al mantenimiento y al cuidado del arbolado. Desde la secretaría junto a su director Lic. Raúl Tello, genera el área verde como unidad técnica cuya función es asesorar y desarrollar programas para los municipios. Algunas veces la secretaría se encuentra haciendo las labores que le corresponden al municipio, por ejemplo, darle la respuesta al vecino. Desde nuestro lugar nos compete tener una cobertura de casi 90.000 kilómetros cuadrados que es lo que corresponde al territorio provincial en un área que no está diseñada para prestar o bien hacerse cargo de todo. Los proyectos y programas provinciales, donde incluimos al municipio, trabajan visualizando al arbolado público como una totalidad, como un ecosistema. 

La recomposición es necesaria

San Juan posee una arboleda que ya cumplió su ciclo biológico, ya que son seres vivos, además sufren las diferentes situaciones climatológicas que les toca sortear. Otro factor preponderante fue la crisis hídrica, esto hizo que las napas freáticas bajaran y el árbol debió buscar agua en las profundidades. Esto acarrea un envejecimiento y mal estado de cada especie. Otra causal, son las podas indiscriminadas o mal realizadas provocando un envejecimiento precoz.

Todas estas situaciones hicieron el deterioro del entorno, entonces, son las que debemos cambiar o transformar. Es un cambio de paradigmas y visualizar el bosque urbano como estructural a ciudad, haciendo líneas de base y plan de riego acorde a un objetivo que comprenda la totalidad. Es un grave error pensar que la poda le hace bien a un árbol. Es una herida en la que tarda años en cicatrizar, y luego viene el calor y el verano y buscamos las hojas verdes para ampararnos. Además las malas podas provocan una deformación en el sistema radicular que su consecuencia es el levantamiento de veredas o entrada de raíces al hogar.

Es un mal manejo que debe cambiar. También se debe pensar en esta situación: En el diseño moderno arquitectónico poco tiene en cuenta el paisajista al ejemplar del árbol, se prefiere la gran pradera o el césped. San Juan requiere árboles por la radiación que está por encima del promedio nacional y el clima desértico. Por lo tanto entre los factores enumerados y el modernismo se hace necesario una forestación apropiada.

Plan forestal 2017

Desde nuestro lugar diseñamos año tras año el programas de forestación provincial, bajo las características geográficas y climáticas reinantes en San Juan. El proyecto eje de este año hace a la recomposición del arbolado destinado a espacios verdes y tasas vacías. La intención es abrir el juego a las instituciones, es bueno que el vecino a través de su club, unión vecinal y de todas las formas de participación, se integre al plan de forestación ambiental participando en conjunto con el obrar público. La idea es un trabajo en conjunto.

Este programa se entrega al municipio para acoplarse a objetivos de forestación. Dicho plan consta de objetivos y metas, lo más relevante es mejorar los bosques urbanos de los distintos departamentos de la provincia, mediante la prestación de asistencia técnica, educación y asistencia financiera. Para ello debemos sensibilizar a la sociedad sobre los beneficios, valores y gestión de los bosques urbanos, que consta de los siguientes puntos:

* Preservar, proteger y aumentar la calidad y cantidad de árboles de la provincia 

* Tratar al bosque urbano como infraestructura, para garantizar que los árboles sean parte integral de la planificación de la ciudad.

* Establecer programas de Educación y Extensión para promover el conocimiento sobre el manejo y conservación de los bosques urbanos, a través de publicaciones sobre: Valor del Bosque Urbano
– Cómo plantar árboles – Cómo mantener árboles – Creación de espacios verdes sostenibles – Cómo mantener un sistema de riego eficiente. Otorgar información técnica, educativa y logros obtenidos a todos los sectores de la comunidad.

* Aumentar la participación social promoviendo la capacidad de acción de la comunidad: Celebrar el día del Árbol con diferentes eventos. Identificar a los individuos y líderes comunitarios locales en el área con interés en la silvicultura urbana y ayudarlos a desarrollar organizaciones. Establecer el Premio a la Excelencia Forestal Urbana.
Implementar un proceso para evaluar los bosques urbanos.

* Preparar un inventario para evaluar la cobertura arbórea en la ciudad. Eliminar los peligros potenciales de los árboles en lugares públicos, parques e instalaciones mantenidos por los diferentes municipios. Identificar nuevos sitios de plantación, donde se pueda aumentar el bosque urbano. Implementar una campaña de plantación. Desarrollar, establecer y financiar un programa de reemplazo de árboles urbanos.

* Programas de capacitación sobre las mejores prácticas de manejo, para todos los trabajadores municipales. (Cursos sobre: Importancia de la poda; Cobertura apropiada de árboles; Mantenimiento de árboles; Selección de Especies; Prácticas adecuadas de plantación).

* Ampliar la participación de la Dirección de Arbolado, ayudando a municipios para desarrollar ordenanzas, programas de manejo e inventario de árboles.

Para finalizar desde la Secretaría de Medio Ambiente y desarrollo sustentable la propuesta es tratar al bosque urbano como infraestructura, para garantizar que los arboles sean parte integral de la planificación de la ciudad’.

 

Los errores que no deben ocurrir

 

Tal es la importancia de ellos que es fundamental una gestión racional y adecuada, especialmente, sobre los árboles de alineación o arbolado público, que son los que sufren las situaciones más hostiles y de descuido.

 

Para tener en cuenta

A partir del 17 de abril comienza una capacitación de poda para la gente que trabaja con la poda, a fin de generar un registro. Este curso durará un mes y medio. Estará compuesto por una formación y luego se desarrollará la práctica de poda. Es en beneficio del operador.