Por Lic. Prof. Fernando A. Ocampo Bravo
Durante siglos, Medio Oriente estuvo en control del Imperio Otomano, una región, diversa; en pueblos, cultura y religiones.
A fines del siglo XIX, el imperio ya estaba en decadencia con el reinado del sultán Mehmed VI, Francia y el imperio Británico, comienzan a establecer protectorados estratégicos en la región, especialmente los británicos que controlaban lugares claves como Egipto, Kuwait, Omán, parte de Yemen, Emiratos Árabes Unidos y Bahréin. Dominando así las rutas marítimas, de vital canal de Suez.
En 1914, el imperio otomano se alinea con Alemania, Francia y Reino Unido negocian en secreto el acuerdo Sykes-Picot, para repartirse su territorio, tras su derrota en la Primera Guerra Mundial, el imperio otomano desaparece del mapa, y con los tratados de Sevres (1920) y Lausana (1923), dibujan las fronteras ignorando totalmente las identidades culturales, lingüísticas y religiosas, además en 1948 en Tel Aviv, la creación del Estado de Israel por parte de la ONU (Organización de Naciones Unidas), añade más tensión al tablero.
Guerras regionales
La oposición de los países árabes a este nuevo estado desata Guerras y agrava el conflicto regional, en medio de este desorden el petróleo se convierte en el motor del mundo, al principio lo controlaban potencias extranjeras, los países árabes reaccionan con una nueva ideología: El Panarabismo, que buscaba unir al mundo árabe, recuperar el control del petróleo y modernizar la región.
El Panarabismo es una ideología política perteneciente al ámbito del nacionalismo árabe que propone que todos los pueblos árabes sin exclusión, tanto de Asia como de África, conforman una única nación y que deben por tanto caminar hacia su unidad política; pero hay muchos casos en lo que acabó en dictaduras de las minorías surgidas de aquellas fronteras maltratadas, fueron oprimidas.
Por ejemplo, el régimen de Saddam Hussein (1979-2003), fue una dictadura baazista y presidencialista que gobernó Irak con un sistema basado en el control absoluto, el terror y la represión, aunque también promovió la modernización y diversificación de la economía y la nacionalización del petróleo.
Sus políticas exteriores llevaron a Guerras costosas y a un aislamiento creciente, sus políticas internas incluyeron la persecución de disidentes, el culto a la personalidad y la promoción de la unidad árabe. El régimen cayó en 2003 tras la invasión liderada por Estados Unidos.
El régimen de Sadam Husein fue sunita, aunque el partido político que lideraba, el Partido Baaz, era secular y de tendencia izquierdista. A pesar de gobernar un país con mayoría chiita, Husein favoreció a los sunitas, especialmente a su propia tribu, mientras que las comunidades chiitas y kurdas fueron marginadas y a menudo reprimidas.
¿Cuál es la diferencia entre chiitas y sunitas?
La diferencia radica en la sucesión del profeta Mahoma: los sunitas creen que el líder debe ser elegido por la comunidad (Abu Bakr), mientras que los chiitas sostienen que el sucesor era el primo y yerno del profeta, Alí y sus descendientes.
Esta disputa original dio lugar a diferencias doctrinales en cuanto a la autoridad religiosa, con los chiitas venerando a sus clérigos y la familia del profeta, mientras que los sunitas siguen la Sunna del profeta y a sus compañeros.
En 1979, la revolución islámica de Irán, lo cambia todo, nace un régimen chiita con ambición regional, que gana influencia, en Irak, Siria, El Líbano y Yemen.
Los países suníes liderados por Arabia Saudita, reaccionan y el Medio Oriente queda dividido tres bloques enfrentados, países chiitas bajo la influencia de Irán, países suníes con Arabia Saudita y por ultimo Israel como actor clave en este conflicto.
¿Quiénes son Chiitas?
En el mundo su distribución geográfica: Son la mayoría en países como Irán, Irak, Bahréin y Azerbaiyán, y existen importantes comunidades en Líbano, Yemen, Afganistán, India, Pakistán y Arabia Saudita.
¿Quiénes son Sunitas?
Son mayoritarios en gran parte del Medio Oriente, el norte de África y el sudeste asiático, incluyendo países como Arabia Saudita, Egipto, Indonesia, Pakistán, Turquía y Marruecos.
El Islam es la religión que más rápidamente crece en el mundo y se espera que para finales de siglo supere al cristianismo como la confesión con más fieles del planeta. Se estima que hay entre 1.800 y 1.900 millones de musulmanes en el mundo, representando aproximadamente el 22% de la población mundial. La mayor parte de esta población no comparte las ideologías violentas o radicalizadas. Algunos grupos extremistas, como el Estado Islámico y Al Qaeda, se estima que tienen miles de miembros, pero son una minoría minúscula.
Las tensiones siguen impuestas hoy; Fronteras impuestas, Intereses extranjeros y bloques enfrentados, es de Medio Oriente un polvorín sin apagar.
Una ‘OTAN árabe’’
Este es un concepto que ha resurgido en las propuestas de algunos países árabes, principalmente Egipto, para crear una fuerza militar conjunta similar a la OTAN, destinada a la defensa colectiva contra posibles ataques.
La idea, impulsada por tensiones recientes en la región y la idea de una protección mutua entre naciones, ha ganado impulso y se discute la posibilidad de unir a los países en un bloque militar que incluiría fuerzas terrestres, marítimas y aéreas, además de unidades antiterrorista.
En la actualidad, no existe una ‘OTAN árabe‘ formal, pero Arabia Saudita y Pakistán han firmado un Acuerdo Estratégico de Defensa Mutua (SMDA) que funciona de manera similar a la cláusula de defensa colectiva de la OTAN. Este pacto, firmado el 17 de Septiembre de 2025, considera un ataque contra uno como un ataque contra ambos, ofreciendo una protección mutua y fortaleciendo la disuasión, especialmente la nuclear de Pakistán, que ahora se extiende a Arabia Saudita. Este acuerdo se produce en un contexto de tensiones regionales y un creciente deseo de los países de la región por una mayor autosuficiencia en seguridad.
En el antiguo testamento en la biblia dice los siguiente; Isaías 2:4 – ’Y juzgará entre las naciones, y arbitrará entre muchos pueblos; y martillarán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en hoces; no alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra’’.